Este viernes llega el Black Friday, uno de los días de
compras más destacados del año. Durante esta jornada (y en muchos
casos desde días antes) un gran número de comercios realizan
ofertas especiales para anticipar la compra de regalos de Navidad.
Desde AVACU, queremos recordar algunas recomendaciones para los que
tengan previsto aprovecharlo:
Si
bien
puede
ser
un
buen
momento
para
aprovechar
los
descuentos
creemos
que
hay
que tratar de evitar
dejarse llevar por la oleada de ofertas y
publicidad, comprando siempre artículos que tengamos previstos y, a
ser posible, conociendo de antemano su coste para saber si realmente
el precio de oferta es
ventajoso.
Los
comercios deben informar
al consumidor sobre
la duración de los descuentos (si solo son para ese día o se
amplían al fin de semana, por ejemplo) y siempre se ha de indicar
el precio anterior junto al actual o el descuento aplicado. La
tienda puede aplicar descuentos a los productos que desee, no
necesariamente a todos.
Los
productos nuevos que compremos tienen la misma garantía
legal que
habitualmente, dos años, aunque el comercio o la marca del artículo
puede ofrecernos un plazo mayor como garantía
comercial.
Sobre
la
posibilidad
de
realizar
cambios
o
devoluciones,
si
compramos
en
una
tienda
física habrá que
consultar esa posibilidad, ya que es una política que depende de
cada establecimiento.
Al
Black
Friday
le
seguirá,
el
lunes,
el
Cyber
Monday,
centrado
en
las
compras
por
internet. En el caso de
las tiendas online,
si no son conocidas deberemos fijarnos en su fiabilidad, observando
que aparezcan datos identificativos del comercio, formas de contacto
y condiciones de
compra.
Además,
habrá
que
tener
en
cuenta
los
gastos
de
envío,
el
modo
y plazo de entrega o los
medios de pago disponibles. En este tipo de compras, disponemos de
derecho de desistimiento y, con él, tenemos 14 días para devolver
el producto, con la excepción de algunos artículos por razones de
higiene, por estar personalizados… Si
queremos ejercerlo,
debemos ponernos en contacto con la tienda, desde donde nos
indicarán cómo proceder. En principio, todos los gastos derivados
de esta incidencia se aplicarán al comercio y no deberán ser
abonados por el
consumidor.
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