Cantó se compromete a ahorrar a la Generalitat 750 millones anuales

El candidato de Cs a la Presidencia de la Generalitat valenciana, Toni Cantó, se ha comprometido a ahorrar a las arcas públicas 750 millones de euros al año, sobre todo en duplicidades administrativas, empezando por dejar en siete las diez consejerías actuales.

"Nos apretaremos el cinturón", ha asegurado en un acto en el Paraninfo de la Universidad de Alicante, donde no ha habido ni un solo hueco, y se lo apretarán -ha recalcado- para poder dedicar ese dinero a eliminar los barracones de los colegios y las listas de espera en la sanidad, dos de los principales problemas que preocupan a los valencianos.

"Ahora Ximo Puig dice que va a acabar con los barracones", la misma promesa que hizo hace cuatro años, ha reprochado Cantó al asegurar que 18.800 niños siguen estudiando en esas condiciones. "Generaciones enteras solo han estudiado en barracones", ha exclamado.

Y de las listas de espera, el aspirante de Ciudadanos ha cargado también contra el tripartito por haberlas aumentado hasta alcanzar las 66.000 personas que sufren esta situación. Por eso ha prometido que rebajará la de 160 a 55 los días que tienen que esperar muchos valencianos.

También ha atacado a los nacionalismos y ha prometido que él no pactará con Compromís, partido al que Puig, según él, "ha cedido la educación, la televisión pública y la economía".

"Ya hemos visto que no han rescatado a personas, como habían prometido, se han rescatado a sí mismos", ha señalado.

Cantó ha acompañado en el acto a la "número uno" por Barcelona, Inés Arrimadas, que este sábado ha tomado el testigo de Albert Rivera en la caravana electoral para que el candidato al Gobierno pudiera dedicarse de lleno a la preparación de los dos debates en TVE y Atresmedia.

Arrimadas ha advertido de que si gobiernan "al señor Aitor Esteban y al señor Rufián se les va a borrar esa sonrisita supremacista de la cara" porque promoverán una reforma electoral que fije en el 3% el corte nacional para entrar en el Congreso.

Con una intervención centrada en la crisis catalana y en atacar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por "pactar con los separatistas", ha acusado a "estos señores del PNV" de ser los que deciden qué infraestructuras se tienen que poner en marcha en Alicante o en cualquier otro lugar.

Y "les importa un pimiento", ha subrayado, que haya listas de espera o que los niños estudien en barracones.

Por eso, ha avisado del "peligro de contagio" que se cierne sobre la Comunitat Valenciana con el gobierno tripartito (PSPV, Compromís y Podemos) que encabeza Ximo Puig: "Se contagia más que la gripe".