Leopoldo Bonías Evaristo Fernández San Miguel y Valledor, duque de San Miguel con Grandeza de España de 1ª clase, dijo en su discurso de ingreso en la Academia de la Historia de España de la que luego sería presidente que “la realidad vuela más alto que la ficción a la que sirve a veces de alimento”.
La sociedad española actual es buen ejemplo de ello. La realidad es la que está alimentando la ficción y las denominadas fake news, que no son más que noticias intencionadamente falsas que difundidas son creídas sin necesidad de contrastarlas porque la realidad es todavía más increíble que la propia ficción.
Así, después de contemplar atónitos el bochornoso espectáculo de Dª Idoia Mendía, secretaria general del Partido Socialista de Euskadi que, a la vista de todos y con gran regocijo, cocina, cena y brinda con el miembro de la banda terrorista ETA, Arnaldo Otegui, al parecer hoy reinsertado a la sociedad con todos los honores, hasta el punto de provocar la dimisión de un miembro histórico del socialismo vasco con más de 40 años de afiliación inquebrantable como ha sido José María Múgica.
Y es que después de la festichola de su jefa con el delincuente etarra, el hijo del abogado Fernando Múgica Herzog, el cual fue asesinado por la banda etarra independentista, ha manifestado que se ha cruzado “una frontera moral que nunca se puede atravesar”.
Al adviento de tan ignominiosa conducta, nadie ha puesto en duda la noticia de que el Instituto Cervantes había firmado un convenio para la enseñanza del español como lengua extranjera en el País Vasco publicado en el BOE, como si el gobierno español considerase extranjera a la lengua española en aquellas tierras, tergiversando el auténtico sentido del acuerdo suscrito que no se refiere más que a estudiantes de otros países y no a los nativos de las provincias Vascongadas o del resto de España. Se trata de una fake new perfectamente creíble en un país donde se negocian los Presupuestos Generales del Estado con facinerosos que se encuentran en las cárceles acusados de un delito de rebelión.
Otro tanto puede decirse de la persona con atavío de drag queen que, de forma indecorosa, realiza las funciones de guía turístico explicando con erudición el Belén del Ayuntamiento de Valencia. Todos creen que el Consistorio gasta los fondos públicos en este tipo de astracanadas que innecesariamente ofenden a un sector de la ciudadanía.
Y es que después de ver el discurso del Rey Baltasar de Andoáin con su ya memorable “que lo sepáis, los reyes son los padres” y que el ayuntamiento aún lo defiende negando la libertad de expresión a los que lo critican acusándolos de xenófobos y racistas como si la frasecita en cuestión, en el caso que hubiera sido dicha por Melchor o Gaspar, pudiera haber sido acogida con regocijo y simpatía por unos ilusionados padres que viven como propios los sueños de sus hijos.
En este contexto se celebra la Cabalgata de las Reinas Magas, las que aparecen en un cártel del Ayuntamiento de La Coruña haciendo un corte de manga, cabalgata ésta con unos claros matices ideológicos que hace que muchas personas para las que todo lo católico les era indiferente empiecen a molestarse por estas manifestaciones públicas que se toman a chirigota las tradicionales creencias de padres, abuelos y hermanos. Ya hay quién empieza a preguntarse cuando va a terminar el tiempo de oprobio en España
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