Desde
el PCPV de Sagunt, "queremos manifestar nuestra repulsa a las multas
de 601 € que ha impuesto la Delegación del Gobierno a los
voluntarios del movimiento pacifista Antimilitaristes-MOC por
“…intrusión en instalaciones donde se prestan servicios básicos
(sic) causando interferencia grave en su funcionamiento”. La
“interferencia grave” es que se encadenaron ¡¡en
2015!!
a dos tanques Leopard del ejercito danés, como protesta contra las
maniobras “Trident Juncture” de la OTAN y que utilizaron el
puerto comercial de Sagunto como base militar. Se hace necesario
resaltar que el juzgado Nº 1 de Sagunto desestimó en 2016 las
acusaciones de “desordenes públicos” y “desobediencia” y los
absolvió del delito leve de daños. Ahora, y sin venir a cuento, han
sido multados aplicando la “Ley de Seguridad Ciudadana” (más
conocida como ley “mordaza”) contra unos jóvenes, cuya pacífica
actuación puso en ridículo a la mayor alianza militar del mundo".
Desde
el PCPV de Sagunt "pensamos que debemos ser respetuosos y fieles a la
voluntad de los vecinos/as de Sagunto, que en el referéndum de la
OTAN mostraron su rechazo claro a esta organización militar y que
han mostrado repetidas veces su oposición a las guerras, a través
de múltiples actos públicos y movilizaciones. En este sentido
ya manifestamos en 2009 nuestro rechazo al uso militar del puerto
comercial (moción EUPV pleno municipal
expte. 03/09-m) y en
2015 en nota de prensa con motivo de estas mismas maniobras".
En
un mundo globalizado, donde el capitalismo está promoviendo la
cultura de la guerra como mecanismo de control de los mercados –
gas, petróleo, agua...- con una violencia que supera los tiempos del
imperialismo del siglo XIX, se hace más necesario que nunca reforzar
la cultura de la paz, encaminada a la resolución no violenta de los
conflictos, reduciendo progresivamente los ejércitos, la inversión
en armamento y apostando por el cumplimiento sistemático de otro
tipo de seguridad, la seguridad de la paz, de la solidaridad, de los
derechos humanos: derecho al trabajo, a la educación, a la sanidad,
a una vivienda, a unas condiciones de vida dignas...
Cada
euro que se invierte en armamento, es un euro que se quita al
bienestar de la población. Por eso el coraje y la rebeldía
demostrados por estos jóvenes debería servir de ejemplo de la
apuesta por la Paz frente a la barbarie de la guerra. Entendemos que
lejos de merecer un castigo por su actuación, estas personas son
merecedoras de nuestra consideración y agradecimiento.
Asimismo
entendemos que el Ayuntamiento de Sagunt como representante de toda
la ciudadanía, debería expresar su solidaridad con las/os
inculpadas/os y protestar por semejante desatino.
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