El Supremo ratifica la sentencia del TSJCV que anula la cesión del Ayuntamiento de Canet de un solar al Colegio Mas Camarena

Ante el fallo del Supremo que anula la adjudicación en 2013 de un solar municipal de unos 9.000 metros cuadrados en Canet d'En Berenguer al colegio de Mas Camarena en detrimento de la otra empresa, El Plantío, que también optaba para la construcción de un centro educativo bilingüe, El Periódico de Aquí se ha puesto en contacto con el primer edil, Leandro Benito, quien ha aseverado que la “sentencia es inejecutable”. El primer munícipe ha esgrimido que “tendríamos que empezar de cero y volver a licitar, lo que es imposible”.

Aunque como ha manifestado Leandro Benito “se trata de una pelea entre mercantiles y que como siempre que hay una licitación, la empresa que no ha sido adjudicataria tiende a pleitear”; ha pedido en este caso “prudencia y discreción con respecto al resto de la Corporación para continuar el trabajo de negociación con el que esperan llegar a un acuerdo, ya que si no, podría perjudicar al propio Ayuntamiento de Canet y a terceros”.

No obstante, el alcalde ha defendido que la adjudicación en su momento al Colegio Mas Camarena estaba avalado por “un informe del técnico de educación donde se reflejaba que frente a la empresa El Plantío, la beneficiaria presentaba un proyecto educativo más completo, mientras que la anterior sólo abarcaba infantil y primaria”. Y así fue aprobado por unanimidad por la Corporación Municipal en las mesas de trabajo, como luego en el pleno”.

Al ser preguntado si el anterior secretario municipal pudiera estar detrás de este asunto, ha añadido que “la dueña de El Plantío y Sancho mantuvieron conversaciones en su momento y éste incluyó en el pliego de cláusulas que realizó para la licitación que la empresa adjudicataria debía disponer de la acreditación del Ministerio de Educación de Gran Bretaña para impartir el bachillerato en lengua inglesa; lo que es algo que no existe”.

Leandro Benito ha reiterado que “este asunto se encuentra en una fase muy embrionaria que no debe preocupar ni a padres ni a niños, ya que parece una cuestión muy alarmante pero es algo habitual entre mercantiles”. Concluye lanzando un mensaje de “tranquilidad y normalidad para todos” porque confía en que “vamos a llegar a un acuerdo”.