Durante la mañana del domingo se celebraron las tres primeras rondas del Open Ciudad de Segorbe y las cinco conferencias programadas en esta edición.
Una de ellas fue la de la presidenta de la Federación de Ajedrez de Chile, Damaris Abarca, Damaris, titulada El fortalecimiento del ajedrez femenino.
En ella desgrano no sólo la realidad estadística del papel de las mujeres en el ajedrez mundial, sino también lo que se ha dado en llamar la "cultura del menosprecio y el silencio", prácticas habituales que redundan en la ausencia de mujeres en todos los ámbitos del ajedrez.
En el transcurso de las jornadas Danaris Abarca desveló que el 92% de las personas que dirigen órganos de ajedrez en el mundo son hombres.
La presidenta de la Federación chilena ha resaltado que la ausencia de mujeres también es llamativa en la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) donde, de las 243 personas que forma parte, sólo 53 (el 22 %) son mujeres y tan sólo el 17 % tiene voz en el organismo internacional.
Para Damaris, el problema de que no haya mujeres en los puestos directivos es que no se van a impulsar cambios en el resto de los estratos del ajedrez, puesto que "nadie lucha por problemas que no le afectan".
También advirtió de los problemas prácticos que genera la falta de mujeres en el sector de árbitros y entrenadores, para atender en cuestiones femeninas a las ajedrecistas que, en los niveles más tempranos, forman la mitad de los competidores en los torneos.
Abarca trabaja desde la Comisión de la Mujer en la FIDE para minimizar estas diferencias entre géneros tanto estadísticas como culturales que aún atribuyen a los hombres mayores capacidades para jugar al ajedrez por ser "más agresivos" frente a las mujeres, "más compasivas", según las creencias generalizadas.
Otra de las ponencias ha llegado de la mano de Luis Blasco de la Cruz, monitor educativo europeo, quien sentó las bases del ajedrez educativo, donde incluyó el ajedrez social y terapéutico, en contraposición con el ajedrez de competición.
Blasco dejó clara la necesidad de adaptar la formación ajedrecística a los colectivos específicos con los que se está trabajando: "se ha impuesto la idea de que el ajedrez es bueno para los niños hiperactivos y se han llenado los torneos de niños con TDAH y ese no es el camino". "No podemos ir diciendo que el ajedrez lo cura todo", advirtió.
Para el Fide Instructor, hay que distinguir a quién se dirige la clase para diferenciar los métodos didácticos y tener claro que, en colectivos con necesidades especiales, no es tan importante enseñar a jugar al ajedrez como "enseñar a pensar".
Blasco de la Cruz también participa en el proyecto 'La mejor jugada', una iniciativa para difundir el ajedrez en centros penitenciarios.
El investigador valenciano José Antonio Garzón, autor de varios trabajos de referencia internacional, presentó en Segorbe el ajedrez clásico de dos trueques, cuyas normas publicará en breve, y demostró también la vinculación del famoso tratado italiano de ajedrez atribuido a Damiano y fechado en 1512 con el propio Francesch Vicent.
Además, el doctor en filosofía Francisco J. Fernández y la psicopedagoga y coordinadora del programa de Ajedrez en la Escuela del Gobierno de Aragón, Miriam Monreal, disertaron en sus respectivas intervenciones sobre la introducción del ajedrez en las aulas desde perspectivas diferentes.
Enmarcados en estas jornadas el sábado se celebró el noveno Torneo Infantil de Ajedrez Francesch Vicent, que reunió a más de un centenar de niños y el Open Ciudad de Segorbe, disputado este domingo con la presencia de 60 ajedrecistas de ocho nacionalidades diferentes.