Que la Policía arriesga su vida y su integridad física quedó una vez más patente en el suceso que ocurrió en Valencia. Agentes de la Policía Nacional han
detenido ayer por la noche en Valencia a dos hombres de 32 y 44 años, de origen
español e italiano respectivamente, como presuntos autores de los delitos de desórdenes
públicos, atentado autoridad y resistencia y desobediencia, tras increpar a los
vigilantes de seguridad y agredir a los policías actuantes, tras subir al metro
sin billetes y con un perro suelto.
Los hechos ocurrieron la noche
del domingo 7 de mayo cuando los agentes que realizaban labores de prevención fueron
alertados por la Sala del 091 para que se dirigiesen a la parada de metro de
Benimaclet donde se estaba produciendo un altercado con dos hombres que llevaban
un perro.
Inmediatamente, los policías se
dirigieron al lugar donde localizaron a dos hombres con los vigilantes de
seguridad del servicio del metro en el andén, los hombres llevaban a un perro
de estatura grande sin atar y no paraban de gritar. Los agentes averiguaron que
al parecer los hombres habían subido al metro sin billete y con el animal sin
correa, por lo que el supervisor al detectar que no llevaban billetes y junto con los vigilantes
de seguridad les habría pedido que se bajaran en la siguiente parada y que
ataran al animal.
Cuando el tranvía llegó a la
parada correspondiente, los sospechosos seguían sin hacer caso a las
indicaciones, provocando la parada del servicio durante unos 10 minutos, hasta
que fueron sacados del metro por los vigilantes de seguridad, mientras éstos
mostraban una actitud violenta y azuzaban al perro para que le atacara.
Los policías les pidieron la
identificación así como que ataran al perro en varias ocasiones, uno de ellos
tenía la correa del animal en su cinturón, contestando a los agentes con
insultos y agresividad, sin hacer caso a sus indicaciones. El animal no paraba
de ladrar por lo que un policía fue a coger la correa momento en que los sospechosos
comenzaron a agredir a los agentes con manotazos y patadas.
Los agentes tras las
comprobaciones pertinentes los detuvieron como presuntos autores de los delitos
de desórdenes públicos, atentado autoridad y resistencia y desobediencia. Los
ahora arrestados mostraron una gran agresividad durante la intervención
policial, traslado a dependencias policiales y reconocimiento médico, gritando
en todo momento y autolesionándose.
Los detenidos, con antecedentes
policiales, han pasado a disposición judicial.
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