Este viernes 8 de marzo de 2019
se demostró que queda mucho por hacer, y para conseguir la igualdad entre
hombres y mujeres, el objetivo del feminismo, la mejor opción ya fue y será la
república en España.
La desigualdad evolucionó al
llegar la II República, las mujeres alcanzaron la mayor cota de igualdad hasta
el momento, como han apoyado una multitud de historiadores.
Muchas mujeres lucharon por sus
derechos desde el feminismo en la república. Clara Campoamor, a la que el
actual equipo de gobierno dedicó una calle segorbina en detrimento de la
dedicada al fascista Valentín Galarza, fue una de ellas, uno de los estandartes
de la lucha feminista desde el republicanismo. Como diputada luchó por la no
discriminación por razón de sexo, por la igualdad jurídica de los hijos dentro
y fuera del matrimonio, el divorcio y el sufragio universal. Otras mujeres
dignas de recordar fueron Carmen de Burgos, escritora y periodista que sirvió
de inspiración a muchas mujeres de espíritu independiente, María Zambrano,
filósofa y una de las pensadoras más importantes del siglo XX, o Victoria Kent,
primera abogada ante el Tribunal Supremo de Guerra.
La república es cambio,
progreso y también igualdad. Su Constitución del 1931 hizo posible el voto de
las mujeres al igual que el de los hombres. Gracias a ella la mujer adquirió
libertad, independencia, tomó posesión de su destino. Y España debe ser libre
de decidir el suyo, y a la vez alcanzar la igualdad, con la república.
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