Interior de la iglesia de Benicalaf de Benavites. EPDA La recuperación de la iglesia de Benicalaf ya ha llegado al
interior del monumento con la restauración de los esgrafiados y el
sellado de las ventanas de este histórico inmueble de Benavites de
finales del siglo XVII y principios del XVIII. El alcalde, Carlos
Gil, ha explicado a El Periódico de Aquí que el Ayuntamiento
ejecutará a lo largo de 2018 la tercera fase de la puesta en valor
de la iglesia de Benicalaf con un presupuesto de 60.000 euros.
Esta tercera fase incluye el inicio de la recuperación de los
esgrafiados, unas pinturas con relieve probablemente del siglo XVIII
y atribuidos a Xavier Rojo. Su vistosa policromía aún puede
admirarse a pesar de su lamentable estado de conservación. Los
trabajos para restaurar estas obras de arte comenzarán en las
bóvedas de las capillas laterales, tal y como ha apuntado el primer
edil.
Así mismo, durante este año también se sellarán los cristales
de las ventanas con el fin de evitar las filtraciones de agua y de la
humedad, principal causa del deterioro del interior de la iglesia de
Benicalaf.
En esta tercera fase, el Consistorio de Benavites también
elaborará los estudios previos que servirán para orientar el
proyecto y el estudio arqueológico para poner una solera de hormigón
en el suelo, “porque ahora es de tierra”, ha matizado Carlos Gil.
De esta manera, “se podrán colocar en suelo firme los andamios”,
ha detallado el alcalde.
Ayuda
Para poder llevar a cabo esta nueva fase del proyecto de
restauración de la iglesia de Benicalaf, valorado en unos 800.000
euros, el Ayuntamiento de Benavites ha contado una vez más con la
ayuda del Plan de Restauración de Inmuebles de 2017 de la Diputació
de València. Así pues, de los 60.000 euros que se dedicarán este
año a la puesta en valor del edificio eclesiástico, 54.000 euros
provienen de la subvención de la Corporación provincial y 6.000
euros de las arcas municipales.
El primer edil ha destacado que hasta ahora se han invertido unos
120.000 euros en la recuperación de la iglesia de Benicalaf. “Todos
los años realizamos alguna actuación con el objetivo de poder usar
en un futuro el inmueble y darle el valor que se merece”, ha
subrayado Carlos Gil.
La iglesia de Santiago de Benicalaf, declarada Bien de Interés
Cultural, es el único edificio que queda de esta antigua aldea del
municipio de Benavites. Se trata de una edificación del siglo XVIII,
de estilo manierista, de planta rectangular, con una sola nave
dividida en tres tramos, y una cabecera. El interior, totalmente
arruinado, es el clásico de la arquitectura religiosa valenciana de
los siglos XVII-XVIII, con las características capillas laterales
entre arcos formeros. Destaca su puerta adintelada que se enmarca en
bella portada manierista de piedra con ventana rectangular enrejada.
El
municipio de Benicalaf fue agregado a Benavites en 1856. Hacia 1900
quedó despoblado y la parroquia fue suprimida en 1901, utilizándose
desde entonces como almacén e incluso corral de ganado. En 1988 pasó
a ser propiedad municipal y desde 2015 es objeto de obras de
restauración y de consolidación con fondos de la Diputación
provincial y de las arcas municipales del Consistorio de Benavites.
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