El sindicato
CSI·F ha enviado sendos escritos a la Dirección Médica de la Unión Temporal de
Empresas (UTE) de Manises y a Conselleria de Sanidad para que rectifique la
supresión del segundo médico de guardia en la Punto de Atención Continuada (PAC)
de Mislata. A partir de las tres de la tarde y hasta las ocho de la mañana –y
las 24 horas los festivos- solamente un facultativo se ocupa de atender a los
pacientes que acuden de urgencia y los avisos domiciliarios. Esto ocurre desde
el 18 de julio.
La Central
Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) lamenta que “los cargos
directivos han planificado una reducción de efectivos desde la oficina, sin
tener un conocimiento real de la verdadera situación de la asistencia”. Su
decisión ha derivado en que los 45.000 habitantes de Mislata queden con un solo
médico de atención continuada para interior y exterior. Este hecho contrasta
con lo que ocurre en Quart de Poblet, Manises o Ribarroja, localidades con
menor población donde la UTE ha comprendido la necesidad de mantener a los dos
médicos.
CSI·F
denuncia que “se ha generado un problema donde antes no lo había”, y avisa del
riesgo que supone si se produce la necesidad de atender a varios pacientes en
el mismo lapso de tiempo. El sindicato considera que no es una solución el
refuerzo provisional del médico del hospital de enfermos crónicos de Mislata,
ya que este tiene sus propios pacientes a los que tratar y supervisar.
La central
sindical señala, en el escrito presentado ante la Dirección de la UTE que
gestiona el Departamento de Manises, del que depende el PAC de Mislata, y ante
Conselleria de Sanidad, que “si el médico del hospital de enfermos crónicos ha
de realizar una asistencia y el de atención continuada está en una atención
domiciliaria, los vecinos que acudan al centro van a quedarse sin atender o lo
harán tras una gran demora”.
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