El alcalde de Bonrepòs i Mirambell junto al director de la sucursal de Cajamar y el responsable de área de la entidad. EPDA El Ayuntamiento de
Bonrepòs i
Mirambell, a través del
Plan de
Pago a
Proveedores, tuvo la obligación de solicitar a principios del año 2012 un préstamo por la cantidad de 590.000 euros para pagar facturas pendientes que debía el Consistorio correspondientes a los años 2008, 2009, 2010 y 2011 (anterior legislatura).
Actualmente, el préstamo tenía el interés de Euribor + 4,60 y tras haber solicitado la presentación de ofertas a diferentes entidades bancarias, se ha conseguido el tipo de interés al Euribor + 1,04, según explicaron fuentes municipales.
Este nuevo
préstamo les permitirá
ahorrar 17.500 euros anuales de intereses hasta el momento de su finalización. Este préstamo ICO2012 le fue impuesto al municipio para poder pagar las deudas a proveedores que se arrastraban hasta 2012 y que ascendían a alrededor de 590.000 euros.
Las fuentes indicaron que el Consistorio “no ha pedido ningún otro plan de pagos ni ningún otro préstamo desde este, ni ha tenido que servirse de ninguna poliza de créditos para hacer frente a los gastos del municipio”.
Al respecto, Fernando Traver, alcalde del municipio, señaló “que tenemos un estado de tesorería totalmente saneado a pesar de haber tenido que hacer frente en esta legislatura a la devolución de 240.000 euros a los propietarios del cuartel militar así como a una sentencia que condenaba al ayuntamiento a pagar 350.000 euros desde el año 2002 por asuntos urbanísticos”.
Las fuentes remarcaron que a fecha de 31 de diciembre de 2014 el remanente positivo de tesoreria del Ayuntamiento de Bonrepòs i Mirambell es de 367.257 €.
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