El equipo de gobierno de Rocafort dio cuenta al pleno municipal del informe remitido al Ministerio de Hacienda sobre el promedio de Pago a Proveedores del Consistorio correspondiente al cuarto trimestre de 2014. Según los datos del departamento de Intervención, el Ayuntamiento ha conseguido reducir en 189 días el tiempo que invierte en abonar las facturas a sus suministradores en apenas tres años. Así, el promedio de pago ha pasado de los 192 días del tercer trimestre de 2011 a los 33 días de la actualidad, según explicaron fuentes del Consistorio.
Fue uno de los puntos del orden del día de una sesión plenaria que estuvo condicionada, en buena parte, por las consecuencias de no haber podido aprobar un presupuesto municipal para 2015, al no conseguir el gobierno de Amparo Sampedro el apoyo de los grupos de la oposición de la corporación.
De este modo, se tuvieron que llevar a votación varias modificaciones de crédito para garantizar el pago de las ayudas de emergencia a las familias de la localidad más castigadas por la crisis o para poder seguir invirtiendo en mejorar los servicios y las infraestructuras del municipio, dado que, al no haber presupuesto para este año 2015, no existe consignación para cubrir estos gastos. “Los grupos de la oposición han preferido dejar al gobierno en minoría y no tenemos presupuesto para este año, así que apelamos a su responsabilidad para pemirtir que las cosas sigan funcionando y que las ayudas se puedan seguir dando”, remarcó el edil de Hacienda, Víctor Jiménez.
En concreto, las modificaciones de créditos abordadas en el pleno afectan a la partida destinada a las ayudas de emergencia, dado que hay personas que no las han podido cobrar. También sirven para garantizar una serie de inversiones como la remodelación de parques y jardines -el Consistorio tienen que abonar el coste del proyecto mientras que la Diputación destina 100.000 euros a la actuación-; la contratación de un servicio de apoyo para la escoleta infantil solicitado por los propios padres; la instalación de un elevador eléctrico en la Casa de Cultura para facilitar el acceso de las personas con movilidad reducida; la mejora de aceras, como la de la calle San Agustín que ha provocado daños en los vehículos a vecinos de la zona; las obras de ampliación del cementerio municipal; o los 4.500 euros que se necesitan para la adquisición de señales que permitan continuar con el proyecto de reordenación del tráfico en el municipio, indicaron las fuentes.
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