Según un comunicado de la formació política popular, "fue en 2013, con el Ejecutivo Popular
a la cabeza, cuando se produjeron los primeros contactos entre Paterna y la
Conselleria de Educación para que se abriese una sede de la Escuela Oficial de
Idiomas en la localidad. Se trata de una reivindicación histórica de una de las
poblaciones con más habitante de la provincia de Valencia".
Tras los primeros contactos y después
de tener clara la ubicación y dejar los trámites prácticamente cerrados, fue el
Ejecutivo socialista el que, siguiendo su política de ponerse medallas y salir
en fotos, quiso rehacer de cero las gestiones a fin de llevarse el mérito
íntegro de lograr traer la EOI a Paterna.
Así en junio del año pasado el
concejal de educación, José Manuel Mora, aseguraba tras haberse reunido con el
Director General de Política Lingüística que “Paterna estaba avanzando en la
implantación de una EOI en el municipio”. Tras un año completo sin noticias (y
por tanto sin avances), muchos son vecinos que se acercan a los populares para
preguntar sobre las gestiones que se está realizando desde el Equipo de
Gobierno y la única respuesta que se les puede dar es: ninguna.
Entre tanto los meses y los cursos van
pasando y los vecinos de Paterna que necesitan de idiomas para poder acceder a
un puesto de trabajo o sencillamente para poder mantener el suyo, se ven en la
obligación de tener que desplazarse a Valencia o Quart de Poblet, eso sí,
pagándose ellos mismos los desplazamientos y demás gastos.
Desde el Partido Popular se reclama al
Ejecutivo que, por el bien de Paterna, se olvide de las fotos y las medallas y
agilice los trámites tanto como sea posible. De igual manera, expresan su
voluntad de que mientras no esté implantada la EOI en Paterna, el Ayuntamiento haga
los trámites oportunos para poder ayudar económicamente a todos aquellos
vecinos que se ven obligados a desplazarse a otras localidades para poder
formase debidamente.
Para la portavoz del PP, María
Villajos, “el Alcalde debería revisar la faena llevada a cabo desde el Pacte
del Batà y dejar de pelearse por salir en las fotos o ver quién se cuelga qué
medalla, ya que, entre tanto, somos todos los vecinos los que pagamos los
platos rotos y las desavenencias entre PSOE y Compromís”.
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