El portavoz adjunto del PSOE en el Congreso de
los Diputados, José Luis Ábalos, ha anunciado una batería de preguntas para que
el Gobierno explique qué actuaciones va a emprender tras el polémico acuerdo de
Europa de eliminar los aranceles a las importaciones de cítricos por sus
nefastas consecuencias económicas, sanitarias y fitosanitarias.
“Con esta medida, el Parlamento Europeo ha permitirá
que las exportaciones con Sudáfrica tengan un trato preferente en el mercado
comunitario. Una mala noticia para los citricultores por la competencia económica
y el riesgo evidente del contagio de plagas en las explotaciones valencianas”,
ha explicado el diputado.
“Queremos
conocer qué acciones se van a adoptar, si se van a extremar los controles en
nuestras fronteras para evitar que plagas infecten nuestras explotaciones, cómo
se van a minimizar los riesgos y si el Gobierno va intensificar sus acciones en
Europa para evitar que esto suceda”, ha señalado.
Ábalos ha calificado de “nefasta para los intereses
de la Comunitat” la decisión de la Eurocámara, dado que ampara la suspensión de
aranceles a las importaciones de cítricos procedentes de Sudáfrica y otros
cinco países de la Comunidad para el Desarrollo del África Meridional de julio
a noviembre, ampliando así en un mes la entrada de naranjas.
El diputado por Valencia ha indicado que el conlleva
que este producto coincida en el mercado con las navelinas españolas, la
variedad que más produce la Comunitat Valenciana. Por ello, ha insistido, “el
Gobierno debe adoptar soluciones drásticas ante las terribles consecuencias tanto
para los agricultores, como para los productos que pueden verse afectados por
plagas, ante la entrada sin control de cítricos en nuestro país”.
En este sentido, Ábalos ha señalado que el acuerdo
de Europa “no sólo tendrá repercusiones sobre la caída de los precios, sino que
existe un riesgo real de introducción en suelo europeo de nuevas plagas como la
temida mancha negra”.
El portavoz socialista ha señalado que “actualmente
esta enfermedad en los cítricos es una de las principales preocupaciones de los
agricultores. Por ello, la obligación del Gobierno es endurecer los controles
ante una plaga que, según los expertos, puede acabar con la producción
citrícola de un país”.
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