Celebración de festejos taurinos en la localidad de Alboraya. EPDA En noviembre de 2012, el pleno municipal de Alboraya decidió ubicar en el casco histórico de la localidad el recorrido de los ‘bous al carrer’. Este mes, el grupo de Esquerra Unida (EU) en el Ayuntamiento volvió a rescatar esta antigua polémica con la presentación de una moción solicitando una revisión de ese acuerdo plenario. No obstante, según fuentes del equipo de gobierno, es un asunto “que se aborda continuamente y al que se le intentan buscar soluciones de consenso”.
El propio gobierno socialista ha propuesto a las seis peñas de la población un recorrido alternativo ubicado fuera del casco histórico. En concreto, se trata de una zona al final del cementerio municipal, al lado de la estación Peris-Aragó, donde los aficionados podrían instalar sus cadafales o montar una plaza portátil sin generar molestias en los accesos a las viviendas como ocurre en la actualidad. “Es cuestión de tiempo que los toros acaben saliendo del casco histórico pero hay que seguir hablando, negociando y preocupándose por todas las partes afectadas como hace el alcalde, Miguel Chavarría, que siempre está pendiente de que se causen las menores molestias posibles”, remarcó la concejala socialista Ana Bru.
La concejala explicó también que, cada año, las peñas van adquiriendo cadafales, con lo que “llegará un momento que se dará el paso de cambiar el recorrido”. Además, desde el ejecutivo local se han adoptado otras medidas como “partir los días de toros, dado que antes se hacía en seis fines de semana seguidos y ahora son tres en primavera y tres en otoño. También se va cambiando el recorrido para que no se moleste siempre a los mismos vecinos”, señaló Bru, quien matizó que “llegar a un consenso en un asunto como este es complicado, pero desde el gobierno nunca hemos dejado de intentarlo”.
No obstante, la propuesta de EU no salió adelante al contar únicamente con los votos a favor de los seis ediles de Compromís per Alboraia y en contra de los representantes del PSOE, PP y Ciudadanos.
Los socialistas consideran que es un asunto, “y así se lo trasladamos a la concejala de Esquerra Unida”- dijo Bru-, que se debe abordar en la comisión sectorial de fiestas, donde están representados tanto los partido políticos como todas las entidades vinculadas a las fiestas. Por este motivo, “no votamos a favor a la moción”.
Por su parte, la portavoz de Compromís, Angels Belloch, cuyos concejales votaron a favor de la moción, remarcó que “las tradiciones no son inamovibles. Estamos en una democracia y, desde la tranquilidad, se puede hablar de todo”.
En el texto de EU se hace hincapié en que, desde la decisión adoptada en 2012, “son numerosas las quejas recibidas parte de los vecinos”. Según este partido, las quejas se producen debido a las molestias de unos actos que obligan a cortar las calles del casco desde las 16.30 hasta las 21.45 horas y desde las 23 hasta las 3 de la madrugada.
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