Presentación de libro. EPDA
Instalaciones de la fábrica Cointra. EPDA Entre 1950 y 1970 un millón y medio de andaluces abandonaron sus casas en dirección a países como Francia o Alemania, pero también a Cataluña, Valencia, Madrid o País Vasco. También lo hicieron miles de castellanos que huían de la miseria que sumió en la oscuridad a sus pueblos y ciudades. Fueron los llamados años del hambre, del analfabetismo y la penuria de una España devastada por la Guerra Civil y sometida a la dictadura franquista. En esos tiempos de pobreza y falta de ilusión, se instaló en el despoblado barrio del Vallet de Puçol, un pueblo eminentemente agrícola, la fábrica Cointra, lo que marcó la historia de este municipio de l’Horta Nord.
Alrededor de esta factoria comenzaron a establecerse esos inmigrantes en busca de esa oportunidad que no encontraron en sus lugares de orígen. Se trabata de una fábrica de estilo paternalista -propia de la época-, que llegó a tener una media de un millar de operarios. La llegada de esta población al barrio, con una mentalidad y una forma de vivir distinta a la del agricultor de la época, supuso la dinamización del Puçol del siglo XX. En el seno de la factoría, y con la llegada de la transición, empezó el movimiento sindicalista liderado por personas que, posteriormente, ocuparían cargos públicos en el Consistorio de esta localidad.
En el año 2013, la fábrica cerró sus puertas. El barrio empezó a vaciarse de sus antiguos moradores, aunque pronto empezó a recibir a los inmigrantes del siglo XXI, lo que supuso un cambio en la fisonomía del lugar.
Durante estos últimos años, la administración local de Puçol ha puesto su mirada en el barrio, lo que, a través de distintas iniciativas, está permitiendo que El Vallet recupere su memoria y vuelva a ser ese espacio amable de convivencia y bienestar.
En julio de 2016, el Ayuntamiento firmó un convenio con la Universitat de València para realizar un estudio sociológico que abarcaba multitud de temas: social, laboral o análisis de la población. Una vez recogida la información se procesaron los datos y comenzó el estudio para decidir qué medidas se podían implantar en la zona para conseguir que El Vallet se convierta en un barrio responsable y solidario.
En noviembre, el Fondo Social Europeo y la Conselleria de Igualdad subvencionaron con 200.000 euros el proyecto presentado por el Consistorio de Puçol para llevar a cabo una serie de acciones preventivas que se han ido desarrollando durante este año. Entre otras cosas, la subvención, y los fondos municipales, estas sirviendo para hacer un local social, para desarrollar cursos de orientación laboral, para ayudar a la búsqueda de empleo con los itinerarios de inserción sociolaboral, para actuaciones urbanísticas y la creación de una mesa de cooperación. Así, por ejemplo, en estos meses se han pintado fachadas, se ha reacondicionado el cauce del barranco como parte de los módulos formativos o se ha intervenido en los muros con la colaboración de cinco artistas urbanos.
Según explicó el coordinador de Bienestar Social del Ayuntamiento de Puçol, José Luis García, en estos últimos días del año, “se hará un punto y aparte en la continuación de este proyecto” tras la realización de las últimas acciones, como han sido la visita de los antiguos trabajadores de la factoría al IES de Puçol para relatar sus experiencias, la presentación del libro ‘Cointra, essència viva’ y la Feria Intercultural que se celebrará el sábado 16 diciembre en la plaza Gloria Fuertes, frente al parque Ribelles. En esta Feria se realizará un resumen de lo que se ha hecho en el barrio, pero también habrá tiempo para la diversión con actuaciones y para la convivencia cultural.
Presentación del libro
La edil Mar Mazo, la alcaldesa Lola Sánchez y un vídeo realizado por los alumnos del instituto fueron los protagonistas del acto de presentación del libro ‘Cointra, essència viva’, en la casa de cultura, ante un público que llenaba la sala y que estaba formado en gran medida por ex trabajadores de la factoría, quienes han colaborado en la elaboración del proyecto a través de una mesa de participación ciudadana. ‘Cointra, essència viva’ intenta contar la historia de esta factoría a partir de las declaraciones y fotos aportadas por los vecinos que en su día trabajaron en la fábrica o los familiares de quienes lo hicieron hace seis décadas.
Los participantes pudieron recoger gratis su ejemplar en la misma casa de cultura. El resto de interesados en conseguir ‘Cointra, essència viva’ pueden hacerlo en las papelerías de la población, con un donativo de diez euros por ejemplar.
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