Héctor González (Periodista). EPDA Ha ocupado delegaciones de gobierno, la portavocía en pleno de su grupo municipal, el del PP, y acabó sumida en una destructiva cuita interna. Su dilatado paso por la política local, la de Mislata, supuso un inciso en una existencia laboral dedicada al mueble. Una vez comprobó que su discurrir por la vida pública se hallaba en sus estertores, empezó a asumir puestos de mayor responsabilidad profesional. Tanto, que en la actualidad dirige la Asociación de Comercios del Hábitat de la Comunidad Valenciana y ejerce de vicepresidenta primera de la Confederación Española de Comercios del Hábitat.
Ligia Rodrigo enarbola la bandera de la supervivencia del comercio del mueble. Entre 2007 y 2014 este sector, cuyo epicentro en la Comunidad Valenciana se encuentra en l´Horta Sud, ha visto cómo cerraba el 60 por ciento de sus locales. Alfalfar, primordialmente su polígono industrial, continúa siendo su gran bastión. Los municipios de su entorno (Sedaví, Massanassa, Benetússer o Catarroja) configuran su numantino caparazón. No obstante, la sede de la asociación migró de Beniparrell a la capital valenciana, al histórico edificio de muebles La Fábrica, en la avenida del Cid de Valencia.
Rodrigo, en su calidad de portavoz cualificada en su ámbito, considera que ya tocó fondo en 2014, que la ubicación de IKEA en pleno corazón del comercio mobiliario no le restará más clientes. No obstante, apremia a la innovación. A que el vástago del empresario fundador que luego lidió con el negocio cambie la inercia aportando un plus de imaginación. Ya no se trata de competir únicamente por vender un armario a un vecino que se desplaza desde Valencia. El presente consiste en que ese mismo producto te lo quiera comprar un peruano o un indonesio.
La producción del mueble constituye uno de los grandes emblemas de l´Horta Sud. De sus señas de identidad. El comercio lo sustenta como una pata más junto a otras. También necesitan de la fabricación, aliada con los comerciantes. Y del suministro de materia prima. En este último aspecto quiero destacar a un inagotable proveedor de madera y vecino ilustre de Sedaví. Me refiero a José Cabanes, padre del actual alcalde del municipio. Su capacidad e ilusión contribuyeron a pulir el esplendor de un sector que deslumbró a la Comunidad Valenciana desde l´Horta Sud.
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