José Antonio Sancho Sempere, el ex secretario municipal de Canet d'En Berenguer condenado por corrupto y que se jubiló estando en la cárcel de Picassent, no acaba de marcharse de esta localidad del Camp de Morvedre. El martes 13 de junio presentó por registro de entrada en el ayuntamiento un escrito en el que solicita acabar las oposiciones del 2014, según él pendientes solamente de las pruebas de valenciano, y de paso vuelve a solicitar que se ''abonen las dietas que nos corresponden''.
Sancho, quien en las últimas semanas está reuniéndose con antiguos colaboradores, entre empresarios y funcionarios 'amigos', comiendo en varios restaurantes de la localidad costera, está pendiente de volver a la cárcel tras la condena firme del Tribunal Supremo a dos años de cárcel por sobornar a la ex alcaldesa de La Pobla de Farnals, Natividad García. La entrada de ambos en prisión depende de una argucia a la desesperada: la petición del indulto al Gobierno de Mariano Rajoy. Dado que la condena es por corrupción, es previsible que el indulto sea rechazado, por lo que es cuestión de semanas o meses que Sancho y García entren en la cárcel.
Precisamente, Natividad García fue una de las tres finalistas a la plaza de técnico de Gestión, junto a la funcionaria Mar Antoni -con la que Sancho ha mantenido una estrechísima relación, hasta el punto de que le pagó el bautizo de su criatura- y el hijo del ex alcalde de San Antonio de Benágeber. En este caso, Sancho ha sido abogado del Ayuntamiento y luchó por la segregación de esta localidad del Camp de Túria. La relación es tal con el ex alcalde, Eugenio Cañizares, que éste también está investigado por la 'trama de las asesorías', que afecta a una decena de administraciones públicas y que contaría presuntamente como cabecillas con el propio Sancho Sempere y Rafael Parra Mateu. Por este caso ambos pasaron 6 meses en la cárcel de manera preventiva y sin fianza. Salieron a la espera de un juicio cuya causa ha sido troceada en varias dada la gravedad de lo investigado.
Pero Sancho se resiste a aceptar su derrota. Después de muchos años controlando el Consistorio de Canet y alargando sus tentáculos a otras administraciones, como la de La Pobla, posiblemente el caso más chusco, al cruzarse con Natividad García, ahora Sancho vuelve para intentar ''generar miedo y confusión'', señala una persona que ha estado muy próxima al otrora todopoderoso secretario municipal. ''Está por Canet bramando, criticando al director de El Periódico de Aquí y culpándolo de estar en la cárcel y advirtiendo que si él vuelve, lo harán también algunos concejales y funcionarios''.
De momento, la penúltima bravuconada de Sancho se traslada a su petición de terminar las plazas de oposición arrogándose que todavía es el presidente del tribunal, pese a que está jubilado, desvinculado del Consistorio y, además, mantiene varios litigios con la que fue su casa durante tres décadas. Sin embargo, según la ley de la Generalitat de Gestión de la Función Pública Valenciana -que determina que los órganos de selección estarán compuestos exclusivamente por personal funcionario-, Sancho ya no reúne los requisitos para poder formar parte del tribunal, ya que con su jubilación pierde la condición de funcionario. En definitiva, otro intento de Sancho de mandar 'mensajes' a funcionarios y políticos.
En el Ayuntamiento sigue en el departamento de Contratación una de sus hijas -la otra ocupa plaza de funcionaria en La Pobla de Farnals-. Y hasta principios de año estaba también su hijo y socio en varias empresas investigadas, José Antonio Sancho González, como jefe de la Policía Local. Ahora está en Benidorm.