Juan Ferris, Presidente de Caixa Rural de Albal. //EPDA El municipio de Albal cuenta con una entidad que es toda una referencia en la comarca de l’Horta Sud por su labor de apoyo y servicio a los más defavorecidos por la crisis económica. En la Plaza del Jardí, en el número 24, está la Caixa Rural de Albal, a través de su Fundación, se encarga de llevar a cabo numerosas actuaciones sociales, destinando un buen dinero de los beneficios anuales que presenta la Caja para tales efectos.
El presidente de la entidad es Juan Ferris Chilet, un hombre querido y admirado en Albal por su labor desinteresada y que ha recibido recientemente el premio Empresa de este diario en la gala celebrada precísamente en Albal el pasado 5 de febrero. En EPDA hemos conversado un rato con él para que nos cuente más al detalle en que consiste la labor social de la Fundación.
Ayuda al débil
El motivo o razón de ser undamental de la Fundación es garantizar a los más débiles una opción, algo que los grandes bancos no conceden. “El banco de España presiona desde Madrid para hacer fusiones porque no quiere que las pequeñas cajas de ahorros sean autónomas” nos cuenta Ferris, quien añade que “esta caja quiere seguir siendo independiente porque queremos estar cerca del pueblo”.
Al respecto, el Presidente de Caixa Rural de Albal se ha centrado en actuaciones que sólo son posibles desde un plano de cercanía, de confianza, e inviables en muchos casos a través de grandes entidades.
Los desahucios son uno de los grandes objetivos del actual equipo de Gobierno de Albal, encabezado por el alcalde Ramón Mari y también de Caixa Rural en estrecha colaboración con el Consistorio. “Nosotros no tenemos desahucios, no creemos en esa manera de actuar que sí tienen otras entidades. Somos diferentes a otros bancos porque no asfixiamos al cliente. Lo que pretendemos es ayudar al vecino, ser próximos y generar confianza”. En materia de vivienda, Ferris asegura que “si alguien ha dejado una vivienda estando con nosotros ha sido por voluntad propia, en ningún caso porque lo hayamos desalojado por impagos”. Esta manera de proceder les ha supuesto generar menos ingresos, así lo declara Juan Ferris “Puede que cada vez estemos ganando menos dinero, teniendo menos beneficio, pero en ningún caso estamos perdiendo clientes en nuestras oficinas”.
Labor altruista
Una condición esencial para entender esta labor social de Caixa Rural a través de su Fundación es el carácter altruista de personas como su presidente. “Yo no cobro nada de la Fundación, no tengo un sueldo por llevar a cabo esta tarea”. Probablemente sea la mejor manera para que funcione y sea efectiva para ayudar, en definitiva, a los vecinos del municipio de Albal.
La Fundación Caixa Rural de Albal destina entre un 15 y un 20% de sus beneficios anuales a proyectos sociales como destinar dinero a la juventud a través de becas, mejorar las residencias de la tercera edad, ayudar en la medida de lo posible a organizaciones como Caritas y también ayudas económicas para la iglesia del municipio entre otras actuaciones.
Junto a Juan Ferris hay un equipo de profesionales trabajando para este fin. La directiva es reducida, pero efectiva, y la forman Julio Martí como Vicepresidente de la entidad, Miguel Ferris Chilet, hermano de Juan, ejerce como Director General, mientras que Francisco Hernández es el Secretario. Detrás de este equipo de cuatro personas hay también varios vocales y un buen equipo de profesionales en definitiva.
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