La Compañía Atalaya lleva 'Madre Coraje' de Bertolt Brecht a 'Sagunt a Escena'

'Madre Coraje' uno de los grandes textos de Bertolt Brecht estará en 'Sagunt a Escena' en la versión que ha adaptado y dirigido Ricardo Iniesta para la compañía Atalaya.

Este montaje se estrenó con enorme éxito en septiembre de 2015 en Las Naves, del Teatro Español de Madrid, y desde su estreno y su posterior gira por toda España ha cosechado un gran éxito de público y ha recibido el unánime elogio de la crítica. El comentario general sobre el montaje es que ahonda en la capacidad emocional y la tremenda actualidad del mismo. Muchos consideran que se trata del espectáculo más potente entre la veintena que ha llevado a escena la compañía Atalaya, que acaba de cumplir 31 años de trayectoria.

Es también 'Madre Coraje' un espectáculo premiado, obtuvo el Premio al Mejor Espectáculo de Teatro en la VII edición de los Premios Escenarios de Sevilla y obtuvo cuatro premios en los premios del Teatro Andaluz (mejor actriz, mejor vestuario, mejor director y mejor espectáculo) y obtuvo ocho nominaciones en los pasados Premios Max de Artes Escénicas.

En este espectáculo, Atalaya nos ofrece una puesta en escena magnífica de uno de los textos teatrales más emblemáticos del siglo XX, una 'madre coraje' estremecedora que genera una intensidad pasional perceptible en el público.

Basada en la 'Historia de la vida de la estafadora y aventurera Coraje' de Grimmelhausen, la acción se desarrolla entre 1624 y 1636, durante la Guerra de los Treinta Años, un cruel enfrentamiento entre católicos y protestantes que afectó a Suecia, Polonia y Alemania. Allí es donde aparece Anna Fierling, una vendedora de baratijas conocida como 'Madre Coraje', por el valor que parece tener en el campo de batalla. Oportunista, cínica, segura de si misma, Anna va de un territorio a otro. Su meta es sobrevivir, lucrarse con la guerra y proteger a sus hijos. Se debate entre la defensa de su familia y sus intereses comerciales. Su afán en el terreno comercial le impiden defender la vida de sus propios hijos porque la guerra impone sus condiciones.

Al final de la obra, sola y en la más absoluta miseria, le queda su maltrecha carreta para continuar en un mundo en ruinas donde es una víctima más.

Como dijo Bertolt Brecht "la guerra representa sólo la continuación de los negocios con otros medios, pero en la guerra los grandes negocios no los hace la gente humilde y en la guerra las virtudes humanas se convierten en mortales".