La Diputación invierte para frenar la despoblación del interior de Valencia

El presidente de la Diputación durante su visita a Chera.

Las cifras evidencian que decenas de municipios del interior de la provincia de Valencia solo pueden fijarse como objetivo sobrevivir con el modelo tradicional de financiación local. Desde la llegada a la Presidencia de la Diputación de Jorge Rodríguez y su intención de “no dejar a nadie en el camino”, comarcas como Los Serranos, el Rincón de Ademuz, la Hoya de Buñol o la plana Utiel-Requena, con un índice de población de 25 habitantes por kilómetro cuadrado, pueden plantearse hacer frente a la despoblación y consolidarse como núcleos urbanos.

Con la vista puesta en frenar esa despoblación en una superficie de más de 4.000 kilómetros cuadrados, que es lo que abarcan las cuatro comarcas, Rodríguez emprendió su particular gira de interior para seguir de cerca el estado de las inversiones puestas en marcha por la Diputación y conocer la realidad y las necesidades de cada municipio.

En palabras del presidente, “cualquier persona tiene derecho a habitar en estos pequeños núcleos poblacionales a los que esta institución debe ayudar a garantizar los servicios e infraestructuras básicas, pues esa es la principal razón de ser de la Diputación”. ¿De qué manera? “Podemos contribuir a dinamizar los recursos naturales de cada pueblo y seguir invirtiendo en sus potencialidades, como puede ser el turismo rural o el mantenimiento de la industria que da trabajo a estas comarcas”, explica Rodríguez.

La gira de Jorge Rodríguez por el territorio valenciano se inició en Chera, donde el alcalde, Alejandro Portero, trasladó al presidente los problemas que causa el desbordamiento del Pantano de Buseo, en especial en municipios como Bugarra, Gestalgar y Sot de Chera, que se encuentran junto al cauce del río. Precisamente el alcalde de este último municipio, Tomás Cervera, mostró a Jorge Rodríguez los desperfectos causados por las últimas lluvias, provocados por los problemas en el embalse que previamente había visitado el presidente.

Durante el recorrido por el albergue rural de Sot, en el que la Diputación ha invertido 200.000 euros para seguir dinamizando el turismo en la zona, Rodríguez señaló que ayudará a estos municipios a resolver los problemas generados por el pantano, en su papel de interlocutor con otros organismos como la Confederación Hidrográfica del Júcar, la Conselleria de Medio Ambiente y la Delegación del Gobierno.

El presidente de la Diputación, acompañado por los diputados Pablo Seguí, Mercedes Berenguer y Mª Carmen Contelles, completó la primera jornada de visitas en Titaguas, donde una inversión cercana a los 100.000 euros de la Corporación en la zona industrial de este municipio de Los Serranos ha permitido que la empresa de dulces Monteturia, que genera medio centenar de puestos de trabajo en la comarca, mantenga su ubicación al poder incrementar la potencia eléctrica.

Segunda visita al Rincón de Ademuz

La segunda jornada de esta minigira por el interior arrancó en Casas Bajas, en el Rincón de Ademuz, tras hacer noche en Titaguas. Allí, el presidente visitó distintas obras del Plan de Inversiones Sostenibles antes de dirigirse a Casas Altas, donde se reunió con los alcaldes de todos los municipios de la comarca, que en este primer año de legislatura ha recibido cerca de 2 millones de euros en ayudas de la Corporación provincial, incluyendo los 160.000 euros que recibirán este año los siete municipios del Fondo de Cooperación Municipal, a partes iguales entre Generalitat y Diputación.

En este segundo viaje a la zona, tras la visita del verano de 2015, nada más ser investido presidente, los alcaldes y alcaldesas transmitieron a Rodríguez su agradecimiento por ese cambio de criterios y en el modelo de gestión que respeta su autonomía a la hora de decidir las inversiones que necesitan sus municipios.

Desde el Rincón de Ademuz, el presidente de la Diputación se desplazó hasta Alborache, en la Hoya de Buñol, donde visitó junto a la alcaldesa, Mª Francisca Collado, y los diputados Bartolomé Nofuentes y Javier Berasaluce el pozo de El Salvador, la infraestructura que abastece de agua potable al municipio y en la que la Corporación ha invertido más de 250.000 euros.