La Generalitat realiza una campaña de control de etiquetado en 74 productos relacionados con Halloween

La Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo ha llevado a cabo estos días una campaña específica de control de etiquetado en productos relacionados con la próxima celebración de Halloween, con el fin de identificar posibles irregularidades en la información que deben incluir las etiquetas.

En concreto, se han realizado controles sobre 74 productos, de los que 15 son caretas, 34 disfraces para adultos y 25 disfraces dirigidos al uso por parte de menores de 14 años y que, por tanto, se rigen por la legislación aplicable a los juguetes.

Así, en el 69% de los casos se ha detectado algún tipo de irregularidad en el etiquetado, aunque solo un 1% ha tenido que ser retirado por tratarse de una irregularidad grave (dos modelos de máscaras que no contaban con la marca CE y otros dos de disfraces para menores en los que no se indicaban advertencias de seguridad ni el rango de edad a los que estaban destinados).

En concreto, en el caso de las caretas se han controlado un total de 15 productos: En 13 de ellos el etiquetado no incluía la advertencia de que este elemento no supone ninguna protección; en siete no había advertencias de seguridad de forma destacada y 6 de ellas carecían de una identificación correcta.

Por su parte, se han controlado 34 productos de disfraces para adultos. El mayor número de irregularidades (7) han consistido en no indicar correctamente el etiquetado facultativo de la prenda; en 4 no constaba el precio y solo uno carecía de datos de la persona o empresa responsable.

Los Servicios de Inspección de Consumo han controlado también 25 tipos de disfraces para menores de 14 años, constatando que 10 de ellos no contaban con las advertencias de seguridad suficientemente destacadas y ausencia en otros 9 de la identificación completa en el etiquetado.

Estas actuaciones se han realizado tras las visitas de inspección que se han realizado en comercios ubicados en 24 municipios de la Comunitat Valenciana (11 en la provincia de Alicante, 6 en Castellón y 7 en Valencia).

Recomendaciones sobre disfraces y artículos de broma

La Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo recomienda a los consumidores comprobar que disfraces y complementos contengan en su etiquetado el domicilio del fabricante y el número de registro industrial (en los productos nacionales) y el domicilio y número de identificación fiscal del importador (para los productos importados). Además, deberá contener las instrucciones de uso, seguridad y mantenimiento en una lengua oficial del estado español.

En el caso de los disfraces para niños menores de 14 años se recuerda que se consideran juguetes, por lo que en el etiquetado deben incluir, en alguna de las lenguas oficiales de la Comunitat, el nombre y marca del producto, los datos de identificación del fabricante, importador o distribuidor, las instrucciones y advertencias de uso y la marca CE.

Aquellos complementos o artículos de broma cuyo uso pueda suponer un riesgo o que requieran precauciones en su manejo, deberán llevar las correspondientes indicaciones en el embalaje o en el propio producto. Además, los disfraces que van dirigidos a los niños, y por tanto se consideran juguetes, debe llevar el marcado CE.

En el caso de las máscaras deberá comprobarse que tienen orificios suficientemente grandes, de un mínimo de 1.300 mm2, que permitan la ventilación para evitar un posible riesgo de asfixia. También se recomienda prescindir de todos aquellos accesorios o complementos de los disfraces, como clavos, tridentes, etc., que tengan salientes punzantes o puntiagudos por el posible riesgo de heridas y cortes.

Es recomendable elegir pelucas y disfraces de materiales de baja inflamabilidad por el posible riesgo de quemaduras. También se recomienda extremar la precaución en los disfraces para menores de 36 meses en los que deberemos evitar todos aquellos que lleven piezas pequeñas que puedan desprenderse con el peligro de asfixia.

Además, es importante prestar atención a aquellos artículos de broma que puedan producir descargas eléctricas ya que pueden suponer un riesgo para niños menores de 14 años, ancianos y personas con afecciones cardiacas o que tengan implantado un marcapasos, así como aquellos en los que se emplean sustancias que pueden resultar tóxicas.