Paelleros en la Torre Seca de Casinos.FOTO EPDA
Gran zona de ocio y deportiva rodeada de naturaleza. FOTO EPDA Casinos es cuna de peladillas y turrones y cuenta en su término municipal con el paraje de la Torre Seca, un espacio de ocio ideal para esta época de primavera y verano, en un entorno natural que hace las delicias de pequeños y mayores. Esta zona cuenta con paelleros habilitados para el disfrute de las familias que quieren pasar un fin de semana la mar de agradable, así como zona de juegos para los peques de la casa.
ARTESANOS
Visitar Casinos tiene un aliciente especial, como es precisamente visitar a alguno de los 8 maestros artesanos que producen las mejores peladillas y turrones mundialmente reconocidos, todos ellos ubicados en la avenida Valencia, la antigua CV35 que atravesaba antaño la localidad hasta que se construyó la autovía. Además, en dicha avenida hay gran variedad de comercios, entre cafeterías, bares y restaurantes, que ofrecen la rica gastronomía típica de Casinos y la comarca del Camp de Túria. Además, no hay que olvidar la Coooperativa Santa Bárbara, con su excelente aceite y vino y el resto de comercio local disperso por todo el término municipal.
Casinos, que acaba de celebrar el 174 aniversario de su nacimiento como municipio, estuvo poblado en tiempos preromanos. Es importante el poblado ibérico de La Torre Seca, en el que se vivió desde comienzos del siglo IV hasta, posiblemente, las guerras sertorianas del siglo I a. C. Restos más o menos contemporáneos de éstos los hay en el cerro del Corral de Pomer, en la cima alta del Castellar y en el Pla, como se recoge en la página web Casinos.es. Sobreviviendo hasta la plena romanización existió otro núcleo de población en la Seña. De la época romana avanzada son los restos de El Borreguillo y la Caña del Flare.
masías.
En principio, la población fue un conjunto de masías esparcidas por la llanura (MAs de Agustín, Masía del Juez, Masía de Carlos, Casa del Campo…), dependientes de la Parroquia Iglesia de Santa Bárbara (erigida en Parroquia en 1788); pasando tiempo después a depender del municipio de Llíria. A mediados del siglo XVIII, fue formándose el pueblo actual.
El primer Alcalde de Casinos fue Juan Rocher y Visiedo, quien consiguió la independencia de Llíria, durante el Reinado de Isabel II, el día 15 de mayo de 1843.
Todos estos datos se encuentran recopilados en el Libro “Casinos del Siglo XVII a 1815” publicado por el cronista, José S. Murgui.
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