Este viernes, 18 de noviembre a las 19 horas, la asociación de ayuda a mujeres víctimas
de violencia de género, Amigas Supervivientes celebró su tercer
aniversario. El acto tuvo lugar en el centro cívico de Puerto de
Sagunto y contó con una alta participación ciudadana así como por
la presencia de miembros del equipo de gobierno local.
En la primera parte del
acto, se repasaron algunas labores de esta asociación, cuya
finalidad principal es la asistencia, guía y apoyo de mujeres que
han sufrido violencia de género. La primera persona en tomar la
palabra fue Mayte Lafuente, presidenta de la asociación, que explicó
que los orígenes de Amigas Supervivientes se encuentran en un
recurso del área de Igualdad, del mismo municipio, “Pots eixir”,
cuyo objetivo es el empoderamiento para mujeres del Área de
Igualdad. Posteriormente remarcó que la asociación acoge a más
socios/as, aunque no hayan sufrido violencia de género, dado que es
un problema en el que debe implicarse toda la ciudadanía. De hecho,
en esta misma línea, destacó la importancia de los políticos/as y
también del mundo empresarial, puntualizando que éste último, es
el que puede ofrecer trabajo a las mujeres, con la independencia
económica que ello implica. Asimismo, Lafuente hizo hincapié en
cómo la educación es indispensable para lograr la igualdad.
Por otro lado, se hizo un
recorrido sobre las acciones llevadas a cabo por la asociación
durante este último año: ponencias, marchas a Madrid y Tarragona,
actividades para jóvenes, participaciones en el programa “Hermano
Mayor”, sin olvidar que el principal cometido de la asociación es
la ayuda a las mujeres víctimas de violencia de género «Con una
mujer que podamos ayudar en un año, ya nos sentimos que tenemos el
objetivo conseguido». En virtud de ello, han obtenido una serie de
reconocimientos, en forma de premios. No obstante, Lafuente reconoce
que, entre sus prioridades, todavía figura conseguir un local,
puesto que debe haber un lugar en donde atender a las mujeres que
recurren a la asociación y darles la intimidad que ello necesita.
Después se le otorgo un
obsequio al Champion Woman Racing, un equipo de
motociclismo conformado en su totalidad por mujeres, destacando su
contribución a la lucha por la igualdad. Finalmente, se invitó a
los asistentes a dejar su “huella” en el cartel del acto. En ese
momento, Lafuente presentó a Marina Marroquí, educadora social y
especialista en Violencia de Género.
Marroquí, primeramente,
agradeció la invitación y reconoció que ella misma sufrió ese
«infierno de la violencia de género», señalando la dificultad que
entrañan las secuelas de la misma. Entretanto, la ponente relató
algunas de las preguntas que sobrevuelan la cabeza de personas en esa
misma situación, como: «¿por qué me creí su perdón?» o «¿por
qué lo aguanté?». Además, destacó como en estos casos prima la
importancia que se le da a la violencia física, relativizando las
demás, como la psicológica o la sexual. Marroquí fue contundente
al respecto, señalando que la violencia física es el último
recurso del maltratador.
Marroquí prosiguió
explicando el ciclo de la violencia de género, y como la espiral
cada vez va más rápida. A la vez que se mostraba preocupada por las
cifras sobre el maltrato de éste último año, las condenas a los
maltratadores y el hecho de que solo 3 de cada 10 mujeres denuncia,
pero que luego solo la mitad ratifican.
Finalmente el acto
concluyó con un pequeño tentempié ofrecido a los asistentes.
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