La diputada Raquel Pérez saliendo del pleno de la Diputación de Alicante El pasado pleno el equipo de gobierno de la diputación de Alicante se negó a debatir sobre una moción donde se hacía referencia a la trama de corrupción del Partido Popular en el territorio valenciano. Este hecho llevó a la oposición a realizar una denuncia pública donde condenaban esta actitud.
La formación de izquierdas reivindicó su derecho a debatir de cualquier materia en el seno de la institución pública, pues consideran que es el foro indicado para argumentaciones, posicionamientos y realización de acciones políticas, dado que es el máximo órgano público de representación política de la ciudadanía. La ley es subjetiva a interpretación sobre los temas que se han de debatir y deja a consideración del presidente la introducción o no de los puntos a votación. Por ello, afirman que la acción de eliminar propuestas de la oposición es claramente un uso interesado y partidista del equipo de gobierno.
Pérez indica que la censura que aplicó el presidente de la diputación, Cesar Sánchez en el pleno al no permitir debatir sobre el caso Ciegsa les hace cómplices de lo que está sucediendo en su propio partido, deberían ser los primeros interesados en dar explicaciones abiertamente y sin pudores en un ejercicio de trasparencia, naturalidad y honradez, no limitarse a condenar la corrupción y considerarla como casos aislados. La gravedad del caso Ciegsa afecta a toda la comunidad educativa sumándose a los recortes impuestos por el gobierno del PP que están soportando.
Es inadmisible que los sobrecostes y el encarecimiento de las obras en más de un 36% por el enriquecimiento personal de unos cuantos hayan sido a costa de la calidad de la educación pública. Estos hechos añadidos al descenso a un 4,73% del PIB en los Presupuestos Generales del Estado en esta partida han puesto en grave riesgo la educación del alumnado valenciano que ven como continúan hacinándose en barracones, no existen unidades de acceso en primaria e infantil, permanecen en instalaciones con fibrocemento y sin proyectos sobre una red de escuelas infantiles de 0 a 3 años, entre otras muchas carencias.
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