El director de la planta señala una parte de las instalaciones en el mapa. EPDA La planta de ArcelorMittat en la ciudad de
Sagunto redujo hasta un 15% el precio de sus productos durante el
último trimestre de 2015 debido a la competencia desleal del mercado
procedente de China. Así lo ha afirmado hoy en rueda de prensa el
director de la planta de ArcelorMittal Sagunto, Héctor López, junto
a la eurodiputada del PSOE Inmaculada Rodríguez, quien ha visitado
las instalaciones y ha expuesto las propuestas de su partido para
proteger la industria del acero. En el acto también han estado
presentes la directora de Relaciones Gubernamentales y Corporativa de
ArcelorMittal, Ana Escobedo, y el directot europeo de Relaciones
Institucionales de ArcelorMittal, Asier Marquina.
De hecho, la planta de Sagunto tuvo que reducir su producción en
diciembre hasta las 80.000 toneladas, frente a las 150.000 toneladas
de capacidad que tiene la fábrica, lo que supone sólo un 55% de la
actividad a finales de año.
Esta situación provocó un ERE temporal entre los meses de
noviembre y diciembre de unos siete días, que afectó a toda la
plantilla de la planta saguntina, y el director no descartó un nuevo
ERE si no se normaliza el mercado. "No estábamos dispuestos a
vender por debajo de nuestros costes", ha destacado Héctor
López.
La problemática, tal y como explicó la eurodiputada
socialdemócrata, es que China "no respeta las reglas del juego
y practica dumping (vender a precios inferiores al costo),
subvenciona las exportaciones, y todo esto afecta de una manera muy
acusada al acero que no puede competir en las mismas condiciones".
Por todo ello, los socialdemócratas exigen que a China no se le
conceda el reconocimiento de economía de mercado por el impacto
negativo que esto podría acarrear a la industria europea del acero,
y por tanto, a la planta de ArcelorMittal en Sagunto. "Cientos
de miles de trabajos están en peligro", ha subrayado Inmaculada
Rodríguez.
Cabe destacar que ArcelorMittal, principal productor siderúrgico
del mundo, se está viendo peligrosamente afectado por la importación
en Europa de productos siderúrgicos procedentes de China; las
consecuencias de estas importaciones se han traducido en el cierre de
instalaciones en nuestro país, como ha sucedido con la planta de
Sestao, paralizada de forma temporal. A este gran inconveniente se le
suma el elevado precio de la energía en España que incrementa
considerablemente los precios de fabricación al tiempo que resta
competitividad frente a productores como China que venden sus grandes
excedentes muy por debajo del precio del coste de fabricación
europeo.
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