Los
actos de homenaje al 40
aniversario de la cofradía
comenzaron a las 8 de la tarde del sábado con una misa en la que
participaron los juniors y la propia cofradía, de hecho su
presidente Juan Ribelles fue encargado de cantar el Himno de la
Virgen al final de la Eucaristía.
Tras
un descanso de cinco minutos para montar la parte técnica, la
segunda parte de la celebración comenzó con una introducción del
sacerdote Ismael
Ortiz,
que agradeció el trabajo de todos los que se han implicado para que
la iglesia abras sus puertas a vecinos y turistas para realizar
visitas guiadas.
Un
vídeo sobre el turismo de sol y playa ilustró lo que se ha vendido
a nivel turístico de Puçol hasta hoy. Como representantes del
equipo que ha trabajado en la elaboración de la guía turística de
la iglesia de los Santos Juanes, hablaron Encarna
Sebastiá y
Sonia Pineda,
quienes explicaron el trabajo realizado, pero también la necesidad
de no perder más monumentos que forman parte de nuestro patrimonio,
como lamentablemente ya ha sucedido en el pasado con elementos que
hoy consideramos históricos, como el Palau Arquebisbal.
Una
segunda proyección sirvió para ilustrar el nuevo turismo que ahora
comienza a promocionarse, que incluye también el patrimonio
artístico y cultural.
El
presidente de la cofradía Juan
Ribelles
y el alcalde Enric
Esteve
cerraron un acto que es a la vez el punto de salida para recuperar
nuestra historia, nuestro patrimonio y ponerlo a disposición de
vecinos y turistas.
Tras
la misa y la presentación de la guía turística de los Santos
Juanes, la jornada del sábado finalizó con una cena
en la plaza Joan de
Ribera.
Como
postre, la actual directiva rindió un homenaje
a los presidentes
anteriores en estos cuarenta años de funcionamiento de la Cofradía
de la Virgen al Pie de la Cruz, con la entrega de unas placas.
Especialmente emotivo fue el discurso de Pepe Soriano al recogerla.
Por
último, un detalle para todos los asistentes: un abanico... algo que
venía muy bien incluso de noche, dado que el sábado fue uno de los
días más calurosos de este año.
Más
allá del homenaje a la cofradía, la novedad es que Puçol inicia
una colección de guías
turísticas para que los
amantes de esa playa que ha conseguido bandera Azul en los últimos
años, también tengan otras alternativas al turismo de sol y playa.
En la agenda del proyecto ya figuran guías como la ruta de las
piedras, el Museo al Aire Libre que ya dispone de 25 grafitis, la
ruta de los árboles, los mosaicos del casco antiguo, el paraje
natural municipal o el Marjal dels Moros.
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