No, el nuevo programa de Cuatro
no podía estar inspirado en una biblioteca. O podía transcurrir en un
laboratorio científico. Tenía que hacerlo en los ambientes más chonis de
España. Los reyes del barrio, producidos por La Competencia, se estrenaron
anoche en Cuatro y de nuevo volvieron a reunir frente al televisor a una buena
cantidad, sobre todo de jóvenes, dispuestos a ver a sus nuevos “ídolos”. O al
menos esto es los que se creen los participantes, porque absolutamente nadie se
salvó de las pérfidas garras de los comentarios de Twitter, sin duda lo mejor
de la noche.
Los reyes del barrio se
adentra en la vida de 4 grupos de amigos. Por un lado las Moraleja Girls. Gabi,
Nohelia y Paula son tres chicas con un alto nivel de vida que viven en el
barrio de La Moraleja, sus referentes no son premios Nobel ni cantantes
consagrados si no Las Kardashian y su objetivo es adentrarse en el mundo de la
cosmética. Por otro lado desde Valencia están los Burjassot Flow, o lo que es
lo mismo Nyno Vargas, Moro Juan y Scorpion tres chicos de origen gitano que cantan
rap y quieren vivir la música mostrando a la par su excesiva forma de vida.
El otro despropósito son los
Raval Queens conn Duna, Tony y Evans. Persiguen el sueño de convertirse en
cover girls. Y por último, Salamanca Style, con Javier, Cristina y Fede, quienes desde el
pudiente barrio madrileño se han codeado con la élite social. Se consideran
pijos, exquisitos en sus gustos y exclusivos en sus amistades. El objetivo es cumplir
el sueño de Javier, hacer hueco a su nombre en el mercado internacional del
calzado. ¿Lo conseguirán?
Los reyes del barrio
funcionará en Cuatro, una televisión que tras la malograda fusión con Telecinco
hace ya unos cuantos años quedó desprovista de toda personalidad y que al no
lograr una más de carácter informativo como su rival La Sexta ha decidido tirar
por lo que más le funciona: lo trónspido. Quién quiere casarse con mi hijo,
Granjero busca esposa, Un príncipe para…, Ven a cenar conmigo e incluso First
Dates en ocasiones… todo un cúmulo de Pulitzers que forman los pilares de una
programación que pronto verá llegar el destierro desde Telecinco de Mujeres,
hombres y viceversa, ¡los que faltaban!
Cuatro continua con su línea
de programas frikis que le aseguran programa por programa ese 7% de audiencia
para mantener la media diaria. Con Los reyes del barrio elevan a populares a
gente sin oficio, ni beneficio. Perfiles superficiales y egocéntricos
encantados de haberse conocido. Sí la tele es entretenimiento pero también es
cierto que las personalidades más volubles imitan a sus “estrellas” de la tele
y con Los reyes del barrio, Cuatro hace un flaco favor. Incide en estereotipos
erróneos de la juventud con el objetivo de lograr audiencia y ya está. Lo que
prima es el share. Los reyes del barrio es una amalgama de todos los programas trónspidos
vistos hasta la fecha, el sumun del horterismo y ¿por qué no decirlo? Situaciones
que en ocasiones parecen tan guionizadas ya que dan hasta vergüenza ajena.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia