Luisa Salvador, alcaldesa de El Puig de Santa Maria: "Lo que más me preocupa es que la gente tenga un trabajo digno"

Luisa Salvador nos hace un hueco entre reuniones para hacer balance del primer año como alcaldesa de El Puig. Habla con pasión de lo que hace, se siente cómoda en el cargo y eso se nota. Se emociona cuando aborda la necesidad de ayudar a sus vecinos sobre todo al referirse a la importancia de que todo el mundo tenga un trabajo digno, su principal preocupación.

-Está a punto de cumplir un año como alcaldesa de El Puig, ¿cómo ha vivido esta primera etapa?
-Ha sido apasionante. Me gusta mucho el contacto directo con la gente, estar en la calle, acompañar a los vecinos en los actos y, en ese sentido, lo he vivido con especial intensidad. De hecho, lo primero que hicimos al acceder al gobierno fue abrir las puertas del ayuntamiento, que la gente cuando entre se sienta como en su casa. La verdad es que me encuentro cómoda en el cargo y estoy también muy a gusto con los socios de gobierno de Compromís con los que compartimos un fin común y una meta: trabajar por la gente y por el pueblo.

-¿En qué cuestiones considera que se ha notado más el cambio?
-Son los propios vecinos los que nos dicen que se ha notado mucho en el trato a la gente, en la cercanía. También en la limpieza del pueblo. Y realmente ha habido un cambio importante en cuanto a prioridades. Las políticas sociales, la educación, la cultura… es lo básico para mi equipo de gobierno. En empleo no tenemos competencia pero buscamos fórmulas para tener contacto con las empresas del pueblo. Acabamos de poner en marcha un programa de subvenciones para fomentar el empleo estable, no el empleo precario, que creemos que va a funcionar muy bien.

-Los macropoyectos urbanísticos, ¿han quedado aparcados?
-No creo que este sea el momento más idóneo para que se materialicen los macroproyectos. Yo solo defenderé aquellos que vayan a crear empleo en el pueblo. Además el PAT de l’Horta, que se presentó recientemente, ha cambiado las condiciones respecto a la posiblidad de emprender proyectos urbanísticos y en Plasmar ya no se puede hacer cualquier cosa. No descartamos presentar alegaciones si vemos que puede haber una salida interesante para el pueblo que no tiene que ser necesariamente un macroproyecto. De hecho, había una persona interesada en hacer algo en esta zona, pero no hay nada cerrado.

-¿Cuáles han sido los asuntos más complicados a los que se ha enfrentado como alcadesa? ?
-La regulación de la situación de las urbanizaciones de la playa es tal vez lo más complicado, algo que está mal por dejadez del anterior equipo de gobierno. Había asuntos que estaban ahí aparcados y hay que resolverlos.

-Según los datos facilitados por Hacienda, el Ayuntamiendo de El Puig es el cuarto municipio más endeudado de la comarca, ¿por qué se ha llegado a esta situación? ¿Qué medidas están tomando para reducir esta deuda?
-Se ha llegado a esta situación por descontrol en el gasto del anterior equipo de gobierno del PP. No ha habido en El Puig grandes proyectos que justifiquen ese exceso de gasto, tampoco se ha incrementado el patrimonio municipal. Es difícil saber en qué se lo han gastado. Hemos llegado a tener 9 millones de deuda con proveedores. Queremos ir reduciendo esa deuda pero sin que ello afecte a la prestación de servicios.
Ahora el PP nos critica que solo hayamos presupuestado 150.000 euros para inversiones, cuando esto sucede por la situación que nos han dejado y que nos impide presupuestar más recursos para inversiones, aunque sí llegará financiación de la Diputación de Valencia para mejorar el pueblo. Lo más importante es que tenemos un presupuesto, algo que no ocurría en el Consistorio del Puig desde el año 2012 pese a que el Partido Popular tenía mayoría.

-Desde el PP se le criticó la pérdida de la bandera azul para la playa, ¿son justas estas críticas?
-La oposición tiene que criticar cualquier cosa que vea. Hubo una avería en una tubería en la zona de la playa, el agua que va a la acequia saltó a la mar. En esos días vinieron de Conselleria a medir el agua y no daba los parámetros que consideran adecuados, lo que no quiere decir que hubiera ningún problema de salud pública, en absoluto. Fue un problema puntual y se resolvió. En cambio, el 7 de junio vamos a Madrid a recoger la bandera Q de Calidad que da el Ministerio, lo que es un poco contradictorio.

-¿Qué destacaría de la gestión turística que está haciendo su gobierno?
-Va a haber mejor servicios en la playa. Hemos recibido ayudas de Turismo y eso se va a notar porque la inversión se ha incrementado notablemente. Hemos habilitado la playa para perros que ha tenido un gran éxito. Además, seguimos apostando por las visitas que ponen en valor el patrimonio natural y cultural de un pueblo con tanto potencial como El Puig y que goza también de una situación privilegiada.

-¿Cuáles son sus prioridades para los tres años que quedan de legislatura?
-Poner El Puig en el lugar que le corresponde, que la gente se sienta orgullosa de su pueblo, que lo disfruten. Pero lo que más me interesesa es que la gente tenga trabajo. Y en estos cometidos se agradece la sintonía con los gobierno de la Diputación y de la Generalitat porque todos tenemos a las personas como prioridad. Un alcalde tiene que velar por el bienestar de sus vecinos y no acceder al cargo para intentar ser diputado. Lo que queremos es que nuestros vecinos vivan bien y que tengan trabajo y en ese cometido vamos a emplearnos a fondo.