La diputada en el Congreso Rosana Pastor La
diputada en el Congreso por el Grupo Confederal Unidos Podemos-En
Comú Podem-En Marea, Rosana Pastor, ha celebrado que Compromís se
sume desde el Congreso a la defensa de la Huerta frente a la V-21.
«Celebramos que Compromís se una desde su grupo en el Congreso a la
petición de paralización de esta obra polémica que cuenta con la
oposición de numerosos expertos y vecinos», ha manifestado, «y
aprovechamos para recordar que Podemos lleva luchando y presentando
iniciativas institucionales en el ayuntamiento, Les Corts Valencianes
y el Congreso desde hace más de un año por la no ampliación de la
V-21 y la salvaguarda de la Huerta valenciana».
«Esta
tarde hemos presentado una batería de enmiendas que forman parte de
nuestro trabajo a lo largo de un año en colaboración con un grupo
de expertos y colectivos vecinales,» ha recalcado la diputada de
Podem, «Compromís ha actuado con gran sentido de la oportunidad y
ha sabido finalmente recogerlas en una autoenmienda de última
hora.»
Ante
la asunción de sus enmiendas, a través de una autoenmienda del
grupo proponente, Podemos ha votado a favor de la propuesta, que ha
sido sin embargo finalmente rechazada con el voto conjunto del PSOE,
PP y C’s. La diputada morada ha lamentado también este resultado,
dado que «esta ampliación estaría contribuyendo a incentivar un
modelo de movilidad obsoleto y altamente contaminante por estimular
el aumento del tráfico hacia las urbes, además de destruir el
paisaje y el territorio, y poner en peligro una de las zonas de
huerta más fértiles de la Comunitat y de Europa».
«La
justificación de la ampliación es aumentar la capacidad de la
autovía V-21 en su tramo final» ha recordado Pastor, «nos
referimos a un tramo con una congestión media de vehículos entre
50.000 y 80.000, lo que significa que no estamos, en ningún caso,
ante una urgencia de congestión. Además, la V-21 no aparece en
ninguno de los mapas de “puntos negros”, ni existe incremento
alguno en los datos de siniestralidad en este tramo. Bien al
contrario, será la ampliación, con su “efecto llamada”, lo que
aumentará el tráfico, la velocidad y en consecuencia,
previsiblemente, los accidentes. La ampliación a tres carriles no se
justifica ni desde el punto de vista social, ni medioambiental, ni
económico».
La
autovía concluye en un complejo sistema de semáforos que regula el
acceso y distribución del caudal de vehículos hacía distintas vías
de la ciudad. Rosana Pastor defiende que la ampliación proyectada no
resolverá el cuello de botella que se produce en la entrada de
València y que por el contrario generará una expectativa que
inducirá una mayor presión de tráfico, inasumible por la ciudad.
«Frente
a la apuesta inteligente por modelos de futuro, esta ampliación
estaría contribuyendo a incentivar un modelo de movilidad obsoleto y
altamente contaminante por estimular el aumento del tráfico hacia
las urbes», ha concluido Pastor, que también ha destacado que sigue
esperando «que el ministro de Fomento, el valenciano José Luis
Ábalos, haga hueco en su agenda para recibirnos», tal como se
comprometió en su comparecencia de julio en el Congreso.
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