Ya lo avanzó servidor cuando el pasado verano me
atreví a dar 10
razones por las que Roberto Leal debería presentar Operación Triunfo antes
de que saliera cualquier tipo de rumor al respecto. Y no me equivoqué. Y a
tenor del buen hacer de Leal y las grandes audiencias que han supuesto el
renacer de OT, tampoco se ha equivocado Televisión Española ni Gestmusic en
elegirlo como conductor de este gigante del espectáculo que ha sido Operación
Triunfo.
No ha podido haber mejor maestro de ceremonias cada
lunes que Roberto Leal, que clama a los cuatro vientos por lógica pura ser uno
de los próximos premiados en los Ondas. Sería una injusticia tremenda
(comparable al robo del Goya a la Mejor Actriz de Reparto a Belén Cuesta por La
Llamada en los últimos premios del cine español) que el sevillano no se alzara con
el máximo reconocimiento que supone este premio para los profesionales del
medio.
¿Y por qué no? también OT donde pese a sus fallos de
sonido ha brindado cada lunes auténticos shows con grandes y rápidas puestas en
escena y donde la música y solo la música ha sido la protagonista. Y no cuando
se emitió en Tele 5 donde el formato acabó prostituido a manos de los
enfrentamientos de guión de un Risto Mejide con ganas de saltar a la fama.
Roberto Leal ha sido natural, simpático, socarrón en
ocasiones, incluso se ha atrevido a bailar en directo… no ha sido el típico
presentador más preocupado en meter la sonrisa falsa y ser políticamente
correcto. Salvando las distancias, Leal forma parte de ese grupo de
presentadores tipo Arturo Valls que no le importa hacer el ridículo en TV,
quiere pasárselo bien, es natural y se comporta como tal. No quiere ser un Ken
estilo Jaime Cantizano con un aura blanca de perfección a su alrededor. Roberto
Leal va más allá, es cercano, campechano, imperfecto… y eso ha conquistado al
espectador.
Las críticas en redes sociales son unánimes: Roberto
Leal ha sido la mejor apuesta que TVE podía haber elegido. Y el éxito también
le acompaña por las tardes donde su España Directo, el programa que presenta y
donde empezó como reportero hace ya algunos años, se sitúa por encima de la
media de la cadena y como tercera opción en su franja, formando un tándem
exquisito junto a Aquí la tierra. Ahora
solo falta que TVE no lo explote demasiado y lo reserve para la próxima edición
de OT que seguramente vuelva el otoño que viene a la cadena pública. Cuando
ésta se estrene, igual Leal ya tiene su Ondas. Se lo merece.
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