María Jiménez. Comenzaré
directamente, mostrando mi más absoluta repulsa a aquell@s quienes
contra todo sentido común y sensibilidad, atentan contra animales
indefensos, que, ya sean con o sin propietari@, acaban enfermos o en
el peor de los casos, muertos por envenenamiento, a manos de
desaprensiv@s, que con estos actos manifiestan la crueldad más
infinita y el hecho de querer hacer el mal por el mal.
Estos
contundentes pero reales alegatos, vienen dados porque ya hace meses
un@s “individu@s” se dedicaron a dejar veneno en el recinto del
“PipiCan” del Sup-II situado en el Puerto de Sagunto, y de nuevo
vuelven a aparecer casos en el Triángulo Umbral, Jardines del Centro
Cívico (antiguo Sanatorio), el barrio de Wichita, la Calle Churruca,
de nuevo en el Sup-II y en la Calle 3 de Abril. Además, en Sagunto
los lugares más castigados por est@s delincuentes son la zona del
río, en las proximidades de Mercadona y en general cerca de los
“PipiCanes” (zona Nord-Palancia).
Como
Concejala que preside el Consejo de Bienestar Animal del Ayuntamiento
de Sagunto, he puesto en conocimiento a la Policía Local y al
Departamento de Sanidad, los continuados casos de envenenamiento de
perros y gatos en la localidad, y así seguiré informando y
denunciando tantas veces como est@s personajes reincidan. El
maltrato animal está penado por ley y debemos ir a por todas para
erradicar estas barbaries. L@s vecin@s, además aseguran que “cada
semana hay envenamientos y que hoy es un perro, pero otro día puede
ser un niño o niña”… e incluso hay fotos circulando por las
Redes Sociales de salchichas llenas de alfileres en su interior, que
algun@s propietari@s de mascotas han podido captar, e incluso sacar
de la boca de sus perros… hasta ahí llega el sadismo de est@s
insensibles.
Toda
la ciudadanía, el Ayuntamiento y l@s animalistas debemos ir de la
mano, para poder dar con l@s culpables, a través de la denuncias
reales y por registro a la Policía Local y al Departamento de
Sanidad, porque como he citado anteriormente, el maltrato animal está
condenado en nuestras leyes. Las Redes Sociales ayudan a difundir el
problema, a hacerlo visible, pero la vía para conseguir una
solución, es la denuncia policial por parte de la población que se
percata “in situ” de los hechos, son quienes llevan y padecen el
pulso diario de estas aberraciones, y es mediante la denuncia
detallada, cuando la policía local puede ponerlo en sus directrices
para poder arrestar.
Porque
los tiempos cambian y las sensibilidades también; Colectivos y
Asociaciones como “SOS Animales Sagunto”, o “Colonias Felinas”
se unen a esta reivindicación; además, éste último colectivo
incluso en ocasiones recibe maltrato y rechazo social, hacia la
figura de sus cuidadoras, por el sólo hecho de velar de forma
altruista por unos gatos que son urbanos, que tienen el derecho de
vivir entre nosotr@s, y es más, regulan también la población de
roedores. Cada vez son más los municipios con Carnets de Colonias
Felinas, y planes para velar por el bienestar de estos felinos. Otro
colectivo que aglutina a defensor@s de las mascotas, han mostrado su
repulsa a través de carteles por la zona del Triángulo Umbral y del
Centro Cívico, en los que se asegura que: “Cada semana muere un
perro envenado en nuestro pueblo”. “Debemos estar atentos a toda
comida extraña en el suelo o ante cualquier persona “sospechosa”
y apelan a la colaboración ciudadana en la labor de vigilancia.
Los
animales no tienen voz, son criaturas inocentes y nobles a las que la
crueldad incomprensible de ciertos human@s está vigente en nuestro
municipio. Tolerancia cero y denuncia social y policial ante estos
hechos. No les dejemos que campen en sus actos salvajes, porque tod@s
estaremos atent@s para poder acortar el cerco y que puedan ser
arrestad@s.
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