Parte del equipo de Som Valencians. // Foto: V.Gutiérrez/Som Valencians.
El
partido valencianista Som Valencians sigue recabando apoyos por allá
donde va. Son muchos los encuentros con la ciudadanía y mitins
celebrados en el último mes. Infinidad de personas, “hartas de la
manipulación en campaña por parte de aquellos que dicen que van a
defender a los valencianos y acaban priorizando los intereses de
Madrid o Barcelona, se suman a este movimiento, que tiene como
prioridad la defensa de la cultura y la lengua valenciana, así como
los intereses de los valencianos y sus reivindicaciones”, apuntan
desde la formación.
En
definitiva, Som Valencians pide el voto de los valencianos “para
ser un altavoz de los valencianos, que busca representar a este
pueblo en las instituciones nacionales, para que, de una vez, se
pongan nuestros problemas sobre la mesa, pues, hasta ahora, lo único
que ha emanado de las Cortes Generales hacia nuestra autonomía ha
sido desprecio y olvido”.
Som
Valencians “es el único partido que, libre de ataduras en Madrid o
Barcelona, puede representar lo nuestro, los intereses de los
valencianos, frente el catalanismo de Compromís y el centralismo de
Ciudadanos, Partido Popular y Partido Socialista. Los candidatos a
Congreso de los Diputados y Senado de estos partidos por las tres
circunscripciones de la Comunitat Valenciana han demostrado, en
reiteradas ocasiones que son incapaces de alzar la voz por los
valencianos en sus sedes centrales, en Madrid o Barcelona, así como
en las oficinas centrales de aquellos que los financian”.
La
ciudadanía de Castellón, Valencia y Alicante “no puede soportar
esta asfixia. Una presión que nos hace pagar impuestos muy elevados,
mientras que nuestros servicios son deficitarios. Los valencianos,
como cualquier español, deben tener acceso a una Sanidad pública y
de calidad, a una Educación universal, a las mismas prestaciones
sociales que el resto. No somos ciudadanos de segunda categoría y,
por tanto, no queremos ser más, pero tampoco menos que los demás”,
apuntan.
Detrás
de cada uno de estos problemas, están la cara y los ojos de aquellos
que los sufren. A Jaume Hurtado y su equipo “les
duele el corazón de ver a personas dependientes morir esperando la
ayuda que el Partido Popular, el Partido Socialista y Compromís no
han alcanzado a pagar. A la gente de Som Valencians le duele ver a
los autónomos con el agua al cuello, sin saber si podrán levantar
la persiana al día siguiente o si será la última vez que la
cierran; a los jóvenes con talento, exiliados laboralmente por medio
mundo; a los niños valencianos despreciados por sus profesores al
utilizar su lengua materna y resistirse a aprender catalán; a las
familias que han perdido su vivienda habitual y que no pueden
remontar, debido a la deuda que les queda por pagar, habiéndolo
perdido todo”.
Por
todos ellos y muchas personas más, Som Valencians lo advierte claro
en su eslogan electoral: “Que no te vuelvan a engañar, votemos lo
nuestro (Que
no te tornen a enganyar, votem lo nostre).
Som Valencians defenderá a los ciudadanos de manera directa, pues no
responden a otros intereses, pues no obedecen a ninguna Ejecutiva
central fuera de la Comunitat Valenciana, pues no claudican ante las
ofensas de Madrid, ni ante el imperialismo de Cataluña”.
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