Héctor González. Destrezas singulares para combatir,
entrenamiento exhaustivo y unas condiciones físicas extraordinarias.
Los pretorianos constituían la élite del ejército romano. Su
principal misión consistía en proteger al emperador de turno, que
en algunas ocasiones se sentía tan orgulloso de sus guardianes que
les hacía participar en espectáculos de caza o en exhibiciones
públicas con el objetivo de presumir de su pericia.
El PSPV ya empieza a destacar la
desenvoltura de alguno de sus nuevos pretorianos en l´Horta Nord, de
militantes que van camino de cumplir tres trimestres al frente de
complicadas alcaldías. Entre los que más despuntan por haber
conseguido asentarse al frente de pactos fruto de múltiples cábalas
se encuentran los de Massamagrell (Paco Gómez) y Tavernes Blanques
(Carmen Marco). La solvencia que transmite su gestión los está
convirtiendo en referentes de su formación en la comarca.
Tras ellos podría situarse el primer
edil de Rafelbunyol, Fran López, bien considerado y relacionado
dentro de su partido aunque todavía no ha alcanzado las expectativas
que había creado. Esperan más de él y de su labor. Igualmente en
este segundo escalafón de pretorianos emergen la alcaldesa de El
Puig (Luisa Salvador) y el de Alfara del Patriarca (Llorenç Rodado).
En la sede regional de Blanquerías son
conscientes de los malabarismos que realiza casi a diario Juan
Antonio Sagredo, con sus seis concejales sobre 25, para continuar al
frente de la alcaldía de Paterna. A falta de más ediles, ha
asentado su potente división de asesores para cimentar su mando.
Eso, mucha calle, ´fontanería´ consistorial y un impulso constante
de la comunicación. El liderazgo de Amparo Orts en Moncada también
resulta complicado debido al batiburrillo de grupos políticos en la
corporación. No obstante, en su caso, a diferencia del de Sagredo,
sí que cuenta con aliados.
Ramón Puchades (Almàssera) y Enric
Palanca (La Pobla de Farnals) gobiernan igualmente gracias a
difíciles pactos que tienen que refrendar a diario. El PSPV sabe de
la situación de fragilidad con la que dirige sus municipios la mayor
parte de alcaldes de l´Horta Nord. Confía en que, con el tiempo, se
acaben consolidando como lo han logrado Miguel Chavarría (Alboraya)
o Rafa García (Burjassot), aunque se conformaría con que
concluyeran su mandato. Más de uno posiblemente caerá -moción de
censura mediante- por el camino.
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