García conversa con los responsables del área de salud de la zona. / epda La denuncia publicada esta semana en redes sociales por una facultativa del centro de salud de Burjassot ha provocado una amplia movilización en esta localidad tanto de la ciudadanía, como de trabajadores, sindicatos e, incluso, la inmediata respuesta de los políticos. Se alerta tanto de la “insalubridad” del edificio que alberga las urgencias sanitarias como de las condiciones en las que trabaja el personal remarcando la “falta de transporte” para acudir a las visitas domiciliarias.
Es precisamente este último extremo el que más preocupa a esta doctora, dado que, en estos momentos, “no se dispone” de ningún tipo de vehículo ni se puede activar el Transporte No Asistido (TNA) con el que contaban hasta hace unos meses. Califica la situación de “grave” en reiteradas ocasiones y asegura que “es imposible, pese a poner el alma en ello, trabajar bien en estas condiciones tan críticas a las que se ha llegado. Si no presionamos todos, acabaremos sufriendo algún disgusto”. En la queja también se refiere a la situación del inmueble con “insectos” y problemas de “insalubridad”.
Esta denuncia se movió rápidamente por las redes sociales. Compartida por usuarios del centro sanitario y otros vecinos de esta localidad, la movilización tuvo una amplia repercusión que derivó en distintas propuestas como la de remitir cartas a Atención al Pacienta del Hospital Arnau de Vilanova, del que depende el servicio, o crear una plataforma vecinal de afectados por esta situación.
La repercusión fue de tal magnitud que, apenas unos días después, el alcalde de Burjassot, Rafa García, se reunió con responsables del área sanitaria que abarca los centros de salud del municipio para trasladarles “la inquietud y preocupación que existe por parte de la ciudadanía al respecto de los servicios que prestan los mismos”, indicaron el miércoles fuentes municipales.
En concreto “se trataron temas de las instalaciones, y también por supuesto, la preocupación al respecto de los traslados del personal médico para poder atender las urgencias externas al mismo, que en estos momentos deben realizar ciertos desplazamientos sin los anteriores vehículos con los que se contaba”, manifestaron.
Por parte de los responsables sanitarios informaron de que son conocedores de toda la situación, en la que llevan trabajando ya varias semanas, y que en un muy breve periodo de tiempo tendrá una solución definitiva, sobre todo, en lo que hace referencia a los traslados.
Desde el PP de Burjassot, su portavoz, Sonia Casaus, calificó de “sorpresa” la “repentina preocupación del alcalde por los problemas que genera la política sanitaria del gobierno de sus compañeros en Burjassot ya que tiene retenidas durante varios meses tres mociones del grupo popular que abordan estos problemas”. “Por un lado, el señor García impide que se debatan en el pleno nuestras mociones, y por el otro esta pensando un salir en la foto con la pancarta” denunció Casaus. Afirmó que desde el PP llevan meses trabajando para solucionar las quejas que reciben “sin que el alcalde haya movido un dedo para solucionarlo nunca”.
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