Hasta 10 años de cárcel. Esta es la pena a la que se enfrenta Diego P. por, al parecer, acostarse con una menor de 13 años, edad límite para las relaciones consentidas, hasta la última reforma del Código Penal, que la eleva a 16 años. El acusado, que contactó con la menor a través de la red social Tuenti, tenía en el momento de los hechos, 22 años. El lugar de la cita fue la localidad de Llíria en el mes de febrero del año pasado. Y los al rededores del campo de fútbol de El Canó, fueron el escenario dónde mantuvieron relaciones sexuales completas. El hombre conocía a la perfección la edad de la menor, ya que está se la había confesado durante sus conversaciones a través de internet.
La jove se quedó embarazada, pero sufrió un aborto de manera natural, dos meses después. La Fiscalía ha impuesto una indemnización a los padres del chico de 10.000 euros. El juicio quedó suspendido en la jornada de ayer por la ausencia del testigo que creó la cuenta de Tuenti a nombre de la víctima
El joven narró los hechos desde el principio y contó que él y la menor contactaron porque tenían amistados en común. Según su historia, se fueron cayendo bien, se dieron sus teléfonos y quedaron. En todo momento defendió la verdad de sus sentimientos y que su relación con la menor iba en serio. Diego P. confesó que él y la menor se querían y que su relación iba en serio.
La menor, durante su turno de declaraciones, aseguró que solo habían quedado para conversar y conocerse más pero que, llegado el momento, solo hablaron durante una hora y que después mantuvieron relaciones sexuales y que en ningún momento se sintió presionada.
