La Confederación
Hidrográfica del Júcar, ha presentado esta mañana en el
ayuntamiento de Albal los resultados y mejora de los mapas de
peligrosidad y riesgos en las cuencas correspondientes a la rambla
del Poyo y barrancos de Picassent, Pozalet y la Saleta.
El estudio se ha
expuesto en el Salón de Plenos del Consistorio, al que han acudido
regidores y técnicos de otros municipios de l'Horta Sud, como el
alcalde de Aldaia, Guillermo Luján, el edil de Massanassa, Paco
Comes o el de Beniparrell, Salvador Masaroca; así como ediles de
Quart de Poblet o Catarroja, entre otros, junto a técnicos de los
distintos Ayuntamiento. A todos ellos les ha dado la bienvenido el
alcalde de Albal, Ramón Marí.
En el acto se ha
hecho oficial que a partir del 19 de julio, todos los municipios
tendrán acceso al nuevo Plan de Gestión del Riesgo de Inundación
de la Demarcación Hidrográfica del Júcar que podrán consultar
hasta el 22 de diciembre. Estos mapas son una herramienta fundamental
de este proceso para solucionar los problemas de los desbordamientos
en la comarca.
El responsable de la
empresa DIPSA (concesionaria del proyecto) Alfonso Caballer, ha dado
paso a los cuatro técnicos que han efectuado la revisión
hidrológica de esta zona de unas 25.000 hectáreas, que han definido
como un proyecto minucioso de unos 10 meses de duración. Han
centrado su plan en estudiar qué provoca la desbordación de tipo
fluvial y se ha llegado a la conclusión de la limitación en ciertas
partes del cauce del río que provocan dichas inundaciones. Cabe
destacar, que los resultados señalan que los próximos 100 años las
aguas transcurrirán con normalidad, sin embargo, las localidades
peores paradas seguirán siendo Beniparrell, Alaquàs y Aldaia.
Estos mapas
presentados hoy, permiten identificar las áreas de riesgo potencial
significativo de inundación, lo que ayudará a los Ayuntamientos a
realizar un mejor plan de actuación para dar solución a las
inundaciones. Catarroja ha pedido a la Confederación consejos que
puedan favorecer la disminución de los desbordamientos, así como
otros asistentes han focalizado que el problema podría venir de
aguas arriba derivado de la desforestación de las zonas boscosas u
otros como Quart de Poblet han pedido que entre todos se llegue a un
acuerdo para hacer un proyecto directo en los barrancos y evitar que
el agua llegue en cantidad a localidades como Aldaia.
Desde la propia
Confederación, han explicado a alcaldes, regidores y técnicos que
no hacen falta grandes obras para dar solución a las inundaciones,
además, se podrían realizar incluso de manera sostenible.
Muchos de los
asistentes han aplaudido el trabajo realizado por DIPSA; alcaldes
como Masaroca (Beniparrell) han señalado que este estudio ayudará a
hacer grandes avances en la materia, mientras que Luján (Aldaia) ha
mostrado su preocupación porque tras los resultados expuesto su
localidad seguirá viéndose afectada por las inundaciones si no se
toman medidas urgentes.