Aprobada la ley que elimina el impuesto de sucesiones y donaciones en la Comunitat Valenciana

Les Corts Valencianes han aprobado, con los votos a favor del PP y Vox, y en contra del PSPV y Compromís, la primera medida económica adoptada por el Consell de coalición de PP y Vox: el proyecto de ley que elimina el impuesto de sucesiones y donaciones.

Esta ley es la primera que el actual Consell ha llevado a Les Corts y su fin es bonificar al 99 % el impuesto de sucesiones y donaciones a cónyuges, hijos y padres con efectos desde el pasado 28 de mayo, cuando el PP ganó las elecciones autonómicas.

Según el Consell, la eliminación de este "impuesto a la muerte" beneficiará 20.000 valencianos y supondrá que el 95 % de contribuyentes no tengan que pagarlo, mientras que la oposición critica que supone "un nuevo regalo a la gente que menos lo necesita", pues perdona casi 400 millones a los más ricos.

La ley ha llegado al pleno de Les Corts tras haberse rechazado previamente las enmiendas de totalidad del PSPV-PSOE y Compromís, que pedían devolver al Consell esta norma, así como las ocho enmiendas parciales de estos grupos, en las que reclaman suprimir todos los apartados.

El síndic del PP, Miguel Barrachina, ha celebrado que se elimine "el impuesto a la muerte" que suponía el impuesto de sucesiones y donaciones, mientras que la diputada popular Carmen Contelles ha defendido que esta supresión beneficia a las rentas medias.

Contelles ha destacado que hoy se visibiliza que existen dos formas de gestionar, la de la izquierda, que "exprime a los valencianos" y la del Gobierno de Carlos Mazón que aplica una reforma fiscal que "alivia a los valencianos".

El diputado socialista José Muñoz ha señalado que la supresión de este impuesto "beneficia únicamente a 20.000 valencianos y supone una bajada de la recaudación de 393 millones de euros".

Ha considerado que esta medida es una muestra de "la clara apuesta del PP para que los que más tienen sigan teniendo más", mientras que el conjunto de los valencianos verá como casi 400 millones de euros dejarán de ser usados para los servicios básicos.

Para el síndic de Compromís, Joan Baldoví, la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones es "un nuevo regalo a la gente que menos lo necesita", pues en estos momentos, 9 de cada 10 valencianos no pagaban este impuesto, y de los que sí, seis de cada diez pagaban menos de 5.000 euros.

La síndica adjunta de este grupo Aitana Mas ha calificado esta ley como una "amnistía a los más poderosos de la Comunitat" o como "el black friday para los ricos".

Desde Vox, la diputada Teresa Ramírez ha defendido la medida como "totalmente buena" y "muy esperada" por los valencianos, especialmente por las familias trabajadoras y la clase media, y ha pedido a la oposición que definan "qué es rico y qué es clase trabajadora".

"Hay mucha gente que se define como clase trabajadora y que dice que este impuesto no es correcto y tiene 8 y 9 viviendas, y gente que con una única vivienda, que es el legado a su hijo, la están considerando como ricos", ha criticado.