Imagen de archivo de recogida de la uva. EFE
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) ha denunciado este miércoles "una campaña de acoso" por parte de la Guardia Civil y la Inspección de Trabajo dirigida a viticultores que "provoca un perjuicio económico inasumible en muchos casos y dificulta las labores de la vendimia en unos pocos días en los que se acumula mucha carga de trabajo".
Para la organización agraria, se trata de un "desproporcionado dispositivo del Gobierno con un evidente afán recaudatorio sobre un sector que está atravesando una grave crisis de rentabilidad y cuya supervivencia resulta fundamental para la economía y el paisaje de las zonas del interior".
Además de "reiteradas inspecciones de trabajo", denuncian que los productores trasladan su malestar porque la Guardia Civil señala motivos de sanción que nunca antes se habían contemplado, como la señalización de los tractores y los remolques que transportan las uvas.
En un comunicado, la asociación agraria insta al Gobierno a "dejar de perseguir a los agricultores y a centrar sus prioridades sobre las grandes empresas o sobre la propia Administración, que es la primera que incumple en la temporalidad de los trabajadores públicos".
"Con tanto acoso administrativo y burocrático al sector agrario, al final lo que parece que quieren conseguir y efectivamente están consiguiendo las administraciones es que abandonemos nuestros campos y nuestras granjas", advierten.
