Imagen de la Iglesia de Benicalaf. EPDAEl Ayuntamiento de Benavites, con la colaboración de la Associació d'Amics de Benicalaf, l'Associació de Turisme Rural Vall de Segó y el Centre Excursionista Vall de Segó, ha organizado las primeras Jornadas sobre Benicalaf. Las actividades comenzarán hoy viernes 4 de diciembre y continuarán mañana 5 de diciembre.
El objetivo de esta iniciativa es dar a conocer la historia de este antiguo poblado de la localidad y reivindicar su valor patrimonial.
Hoy viernes, 4 de diciembre, a partir de las 17:30 horas, tendrá lugar la parte científica de las jornadas, distribuida en cuatro ponencias centradas en este antiguo poblado y la Iglesia de Santiago de Benicalaf que el Ayuntamiento comenzará a restaurar en breve.
Así pues, el cronista oficial de Benavites, Jesús Peñarrocha, impartirá la conferencia 'Benicalaf, un pueblo en el olvido'. El arquitecto técnico Roberto Escribano realizará la ponencia de 'Un passeig per Benicalaf' y Lluís Cortés, 'El ressorgir de Santiago de Benicalaf'. Por último, el escritor Agustí Hernández presentará su libro 'Pobles abandonats'.
La mañana del sábado se dedicará a la realización de una ruta guiada por el patrimonio histórico del termino municipal de Benavites, que incluirá un almuerzo junto a la iglesia de Benicalaf.
Cabe destacar que el Ayuntamiento iniciará en breve la rehabilitación de este templo, que se encuentra en un estado de deterioro importante debido a su abandono. La Diputación de Valencia ha concedido 40.000 euros para llevar a cabo la primera fase del proyecto de rehabilitación. Según ha explicado el alcalde, Carlos Gil, con esta subvención se reparará la cubierta para evitar que sigan cayendo goteras al interior de este monumento del siglo XVIII. Y si el presupuesto lo permite, se comenzará a rehabilitar también una parte de la fachada
El objetivo es frenar el deterioro de este característico inmueble de la subcomarca de Les Valls. De hecho, en 2014 la fachada de la iglesia sufrió desprendimientos. Concretamente, está dañada una parte de la espadaña, zona superior de la iglesia en la que están abiertos los huecos para colocar las campanas.
La iglesia de Benicalaf es uno de los pocos testimonios de los antiguos poblados desaparecidos de la comarca, que recoge la historia de un rico poblado musulmán de 40 ó 50 casas y una iglesia. Era una de las poblaciones más populares de La Vall de Segó y en 1982 se declaró monumento histórico-artístico.
