Un conductor de Cabify limpia su vehÃculo. EFE-Archivo
Un comunicado de Cabify explica que ha adaptado su modelo de negocio a "las restricciones impuestas por la normativa aprobada por la Generalitat" sobre plataformas de contacto entre usuarios y vehÃculos con conductor (VTC) y que ofrecerá su servicio en València y Alicante a través de la empresa Miurchi Car S.L., que forma parte de su grupo empresarial.
Para Cabify, "los usuarios tan solo tendrán que aceptar unos nuevos términos y condiciones por los que contratarán un nuevo servicio de transporte a través de la aplicación y, transcurridos los primeros 15 minutos desde esa aceptación, podrán solicitar su siguiente trayecto".
La empresa española asegura que con su decisión "reafirma su compromiso con la ciudadanÃa, el empleo y los 300.000 usuarios que tiene registrados en la Comunitat Valenciana, alumbrando una solución que implica, sin embargo, la asunción de un mayor riesgo empresarial y mayores costes operativos para la compañÃa".
Cabify considera que las condiciones impuestas por la Generalitat, que entran en vigor el 1 de junio, "en nada benefician ni a la ciudadanÃa ni a los usuarios".
La filial Miurchi Car SL. ofrecerá el servicio de transporte y no el de agencia de viajes, que es el que venÃa utilizando hasta ahora en todas las ciudades, salvo Barcelona, y "operará tal y como lo hacen las empresas de transporte contratadas por hoteles y otros servicios similares del sector VTC tradicional".
Desde este sábado 1 de junio, los usuarios que deseen viajar con la aplicación tanto en València como en Alicante habrán de contratar expresamente el servicio de transporte ofrecido por Miurchi Car, S.L., aceptando para ello unos nuevos términos y condiciones en la aplicación.
Tras la contratación y aceptación de los términos de ese servicio, se establece un tiempo de espera de 15 minutos después del cual el usuario podrá solicitar su siguiente trayecto.
Esta decisión, "que no implica la conformidad de la compañÃa con esta regulación altamente perjudicial para la movilidad y para la libertad de elección de los usuarios, responde al compromiso de Cabify con la ciudad, sus usuarios, sus empleados, colaboradores conductores y con toda su red de empresas asociadas que también trabajan en favor del desarrollo de la economÃa digital y la movilidad sostenible tanto en la Comunitat Valenciana como en el resto de España", añade la nota.
El presidente de Cabify Europa, Mariano Silveyra, afirma en el comunicado que espera que los usuarios "entiendan y respalden" esta adaptación de su modelo de negocio y que sigan viajando con su aplicación y, "al hacerlo, reivindiquen su derecho a elegir entre distintas alternativas de movilidad".
La prestación del servicio a través de Miurchi Car S.L, perteneciente a Cabify y cuyo objeto social es el transporte de pasajeros, "modalidad jurÃdica que no es la más idónea, ya que resulta gravosa, y acarrea unos mayores costes en su operación".
Cabify defiende que su modelo habitual como agencia de viajes (que utiliza en todas las regiones salvo en Cataluña, y desde el 1 de junio en la Comunitat Valenciana), permite "una prestación de servicio mejor para los usuarios, ya que no impone restricción alguna al tiempo de precontratación previo, y se adapta mucho mejor tanto a la demanda como a las necesidades de los usuarios".
La empresa lamenta que el Consell de la Generalitat Valenciana haya optado por "restringir las opciones de movilidad de los usuarios y poner cortapisas al desarrollo del sector de la movilidad", y recuerda que ha denunciado la normativa por "inconstitucional".
La adopción del nuevo modelo de Cabify "se asienta en el convencimiento de que la situación será transitoria, y de que el Decreto ley aprobado por la Generalitat será declarado inconstitucional y revocado por los tribunales en un futuro próximo".
