CAMPAÑA NAVIDAD

Llega la Navidad y aunque sea la época más familiar del año, la pandemia no perdona. No van a ser unas navidades normales, ya que el virus no entiende de tradiciones, de fechas señaladas, de la ilusión de los niños ni de los más mayores.

Todas las administraciones nos encontramos ante un dilema, la encrucijada entre la emoción y la seguridad, la tradicionalidad y la disrupción de la emergencia sanitaria. Dado que no podemos organizar ni celebrar grandes eventos, hemos tenido que reinventarnos para encontrar el equilibrio perfecto entre seguridad, economía y costumbre.

Cuando pensamos en la Navidad, pensamos en niños y niñas, en la ilusión con la que esperan conocer a papá Noel, ver a los Reyes Magos cabalgando y entregar sus cartas, redactadas con consciencia y esmero. Pensamos en el pequeño comercio, que confía en esos ingresos extras en estas fechas tan señaladas. Nos vienen a la cabeza muchos frentes que hemos intentado atajar con la mayor seguridad y efectividad.

Por eso, centrándonos en los más pequeños de la casa, hemos repartido cartas de navidad para que sus palabras y deseos lleguen a los Reyes Magos. Pensando en el comercio local, hemos fomentado las compras dentro de la localidad, a través de campañas con las que mantener vivo el pueblo, inyectando positividad y fuentes de ingresos a nuestros negocios locales.

El 2020 nos ha arrebatado muchísimos momentos señalados: nuestras queridas Fallas, la Semana Santa y nuestras Fiestas locales, aunque la población se ha comportado extraordinariamente, asumiendo la cancelación de estas festividades ¿por qué no íbamos a hacerlo ahora? Es momento de buscar alternativas, de conocer el riesgo actual y actuar en consecuencia, paliando al máximo los efectos negativos de la pandemia, intentando que este 2020 no se sienta tan extraño.

En definitiva, lo mas importante de la Navidad es que el espíritu solidario no se agote, y sé que esta situación pasará y podremos volver a sonreír y a abrazar a nuestros mayores y lo haremos con muchas más ganas.