Tener un índice de masa corporal superior a 40 y estar 'estancado en el peso', es decir, no haber conseguido una bajada de peso mantenida o llevar más de cinco años presentando obesidad, no pudiendo reducir los kilos ni con ejercicio ni con dieta. Estas son las condiciones básicas para ser candidato a una cirugía de obesidad en un hospital público. También son candidatos aquellos que cuentan con un índice de masa corporal mayor de 35 asociado a patologías como diabetes, hipertensión, apnea del sueño o cansancio crónico.
"Cuando el paciente ha hecho todos los esfuerzos por superar su obesidad y no lo ha logrado, tiene en la cirugía un aliado", explica el doctor Raúl Cánovas cirujano bariátrico del Hospital de Manises. Para Cánovas, "se trata de una intervención más allá de la estética, ya que permite que el paciente mejore su estado de salud a nivel general e incluso de algunas patologías asociadas a su obesidad". Para abordar la obesidad y tratarla de forma integral, el Hospital de Manises cuenta con una Unidad especializada formada por un equipo multidisciplinar. Teniendo en cuenta cada caso, el equipo de psicólogos, nutricionistas, cirujanos, digestivos, anestesistas y radiólogos aportan la solución adecuada.
Una vez el equipo médico dispone de un diagnóstico, si considera que la cirugía es la mejor opción, se propone la mejor técnica para la intervención. En el Hospital de Manises se aplican técnicas seguras y contrastadas, como el bypass gástrico, y la manga gástrica. Ambas se realizan con la última tecnología mínimamente invasiva para reducir complicaciones y mejorar la recuperación del paciente.
El centro hospitalario ofrece una atención ágil con plazos muy ajustados. Así, en una media de tres meses el Hospital de Manises realiza todas las pruebas para determinar si una persona es candidata a una cirugía de la obesidad. Un tiempo record para este tipo de pacientes en un hospital público, pues en otros centros la lista de espera puede suponer un par de años.
Gracias a la optimización de tiempos, el Hospital de Manises es uno de los centros públicos valencianos que más pacientes de obesidad opera, con cerca de 200 intervenciones anuales y con tasas de satisfacción muy elevadas, al valorar el servicio con 9,1 puntos sobre 10.
Los pacientes que crean que pueden ser candidatos deben dirigirse al endocrino o a su médico de cabecera para que le remita al especialista. Gracias a la libertad de elección de centro que tienen los valencianos de acuerdo con el Decreto podrán acceder a la Unidad de Obesidad del Hospital de Manises, donde se estudiará su caso.