Compromís per Paterna considera que, "la situación de insolvencia económica que lleva a la empresa municipal Sumpa a pedir el concurso de acreedores, tendrá una consecuencia inmediata: hipotecar el futuro y la viabilidad económica del consistorio. Y todo por la mala gestión de los gobernantes locales del Partido Popular y el derroche que se ha hecho durante los últimos cinco años. Para Compromís es muy preocupante que el ayuntamiento se convierta en 'el pagano' de la quiebra de Sumpa".
La portavoz municipal de Compromís en Paterna, Loles Ripoll, señala que "ya hace tiempo que estamos asistiendo, como invitados de piedra, a la muerte anunciada de Sumpa. Y hoy ya se ha hecho pública, en el Consejo de Administración, con el anuncio del inicio del proceso del concurso de acreedores. Sabemos que debido a la negativa de un banco, la empresa municipal ha acabado así. Y ahora, si debe negociar, precisamente con los bancos, una salida a su nefasta situación, el problema se agravará. Porque ¿cuál será el banco valiente que acepte un aval del Ayuntamiento?".
La concejala Loles Ripoll destaca que "la mala gestión del PP y hacer gastos como los 80.000 euros en conciertos de fiestas o el leasing para el edificio en el Parque Tecnológico, son algunas muestras del disparate y la irresponsabilidad del gobierno municipal. Precisamente, en cuanto al leasing, Compromís se opuso frente a los votos a favor del PP y del PSOE".
Además, "Sumpa también se ha encargado de comprar parcelas municipales, muchas sin ejecutar, a demanda del Ayuntamiento cuando a Agustí le ha interesado disponer de ingresos para hacer y deshacer. Mientras, aumentaba la deuda de Sumpa con las consecuencias ya conocidas".
"Por si todo esto no fuera suficiente, desde la llegada de Agustí a la alcaldía se ha externalizado al secretario del Consejo de Administración de Sumpa, para contratar a Broseta Abogados por cantidades desorbitadas, un gasto totalmente evitable. Y ahora resulta que Broseta dimite de esta secretaría y también es uno de los acreedores".
"Por ello, desde Compromís hemos pedido por escrito todos los ejercicios contables de Sumpa, desde 2007 hasta 2012, para que nos den una cumplida información sobre las deudas que vienen arrastrando la empresa, así como la relación de los bancos que son acreedores y la garantía que tienen para cobrar. Es decir, si responde de la deuda el Ayuntamiento. Y exigimos que tanto la gerente de Sumpa, Carmen Martínez Reig, como el presidente del Consejo de Administración, Lorenzo Agustí, asuman su responsabilidad en la quiebra de esta empresa municipal", concluye la concejala Loles Ripoll.
