Tras las informaciones
aparecidas en prensa sobre el cobro del finiquito del exgerente de
Divalterra, Víctor Sahuquillo, la portavoz popular de la Diputación,
Mari Carmen Contelles, ha calificado la salida de Sahuquillo de
Divalterra de "tomadura de pelo a costa del dinero de todos los
valencianos".
"Después de vender a la
opinión pública que el Sr. Sahuquillo dimitía por honorabilidad y
para no perjudicar más a Jorge Rodríguez, nos encontramos con que
no se ha producido tal dimisión y que se ha procedido a un despido
altamente remunerado" ha añadido Contelles.
Para Contelles "se ha
intentado confundir interesadamente a la opinión pública,
intentando revestir de honestidad la salida de Sahuquillo para tapar
su desastrosa gestión de Divalterra. La supuesta carta de dimisión
del exgerente no ha sido más que otro paripé y finalmente se ha
procedido a despedirlo para beneficiarle económicamente con una
indemnización mucho mayor a lo que le correspondería si realmente
hubiera dimitido."
Según la portavoz "Si la
dimisión no se ha producido, el Sr. Sahuquillo no ha asumido ninguna
responsabilidad de las múltiples irregularidades señaladas por las
dos auditorías y que pese a los intentos por reducirlo todo al gasto
en bebidas alcohólicas o el uso del coche oficial, van mucho más
allá".
"Los 21.969 euros que ha
abonado la empresa pública para el despido de Sahuquillo, suponen
una gratificación económica a su mala gestión con el dinero de
todos y deja en entredicho al mismo presidente de la Diputación.
Cabe recordar que 24 horas antes de anunciar la supuesta dimisión,
declaraba que no habían datos objetivos para que Sahuquillo no
estuviera al frente de la nueva Imelsa." ha destacado Mari Carmen
Contelles.
Para los populares el despido
supone un reconocimiento de la mala praxis del exgerente y el fracaso
del modelo de gestión de Divalterra, que en apenas 18 meses ha
apartado de la gestión a dos gerentes, un jefe jurídico y la actual
gerente de Compromís ha sido acusada públicamente por la consejera
de EU imputada en el caso Taula de querer apartarla del Consejo de
Administración.
Desde el grupo popular
denuncian que los actuales gestores de la Diputación siguen sin
explicar por qué se paralizó in extremis un contrato de 600.000
euros con criterios de adjudicación subjetivos y se niegan a
entregar a la oposición los trabajos contratados a la abogada
vinculada al ex jefe de gabinete de Rodríguez, José Manuel Orengo,
también investigado judicialmente.
Parálisis de Divalterra
Por otra parte la portavoz
popular ha criticado la parálisis que vive la gestión de
Divalterra. "las desavenencias entre PSPV y Compromís están
perjudicando gravemente a la empresa pública Divalterra,
especialmente a los 700 trabajadores y sus familias que viven con
incertidumbre los bandazos de la gestión y su incapacidad para
consensuar un modelo de gerencia." ha concluido Contelles.