El sindicato CSI·F denuncia la pérdida de 1.082 plazas de empleados públicos de la Administración General del Estado (AGE) en los últimos tres años en el ámbito valenciano. Los últimos datos anuales aportados por la SecretarÃa de Estado de Administraciones Públicas revelan que en la Comunidad Valenciana realizan su labor 13.699 trabajadores del Estado, un 7,32% menos que en 2012. La ratio sale a uno por cada 365 habitantes.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) explica que esa ratio sitúa a la Comunidad Valenciana a la cola de España y duplica, por ejemplo, la de Aragón, con un trabajador del Estado por cada 191 ciudadanos. También supera con creces las de Castilla y León (uno por cada 200), Cantabria (uno por cada 245), Galicia (uno por cada 215), La Rioja (uno por cada 270), Murcia (uno por cada 277) o AndalucÃa (uno por cada 279).
CSI·F insta al Gobierno a reforzar las plantillas de Servicio Público de Empleo Estatal, Fogasa, Instituciones Penitenciarias, Agencia Tributaria, Tráfico, Confederación Hidrográfica del Júcar u oficinas de expedición de DNI y pasaporte, entre otros organismos. El sindicato explica que las elevadas ratios actuales provocan una sobrecarga de estos servicios e impiden ofrecer la atención adecuada.
La central sindical subraya que la gestión de personal realizada por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha provocado una elevada amortización de plazas en la Comunidad Valenciana. Al mismo tiempo, no convoca suficientes concursos públicos con las vacantes necesarias para prestar un servicio eficaz al ciudadano.
El sindicato señala que esa pérdida de personal, unida a la sobrecarga de trabajo y a la caÃda del poder adquisitivo de los empleados públicos debido a los continuos recortes salariales que han sufrido, genera una desmotivación del colectivo. CSI·F reclama soluciones urgentes, como no amortizar las nuevas vacantes que se producen por jubilación, aumentar la relación de puestos de trabajo de los distintos organismos o instar a devolver a los trabajadores los derechos recortados.
