Imagen de archivo de un avión turístico.- EPDAPara poder viajar por vía aérea o marítima a Francia, todos los viajeros mayores de 11 años deben tener un ciclo completo de vacunación contra la covid-19 (Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Janssen/Johnson & Johnson) al menos al menos 14 días antes del viaje (28 días en el caso de Janssen), o bien, deben presentar una PCR o un test de antígenos negativo realizado hasta 72 horas antes del viaje. Ambas circunstancias podrán acreditarse mediante un documento en papel o un certificado digital. A partir del 1 de julio, se admite el certificado digital europeo, que puede acreditar una de estas dos circunstancias anteriores o el haber pasado el Covid en los últimos 6 meses.
Además de esto, antes de embarcar, cada pasajero presentará una declaración jurada (cuyo modelo de formulario será facilitado por la compañía aérea) que certifique que no tiene síntomas del virus o que ha estado en contacto con una persona positiva en las últimas dos semanas. En adición, el pasajero podrá ser sometido a una prueba PCR o de antígenos por las autoridades francesas a la entrada del país.
Como dato adicional, la mayoría de las compañías aéreas solamente admiten el uso de mascarillas quirúrgicas, y no las mascarillas de tela.
Reino Unido utiliza el "sistema de semáforo" para controlar las entradas y salidas a países desde mayor a menor incidencia de coronavirus. España se encuentra en el nivel ámbar. Esto significa que, aunque el pasajero esté vacunado, antes de viajar debe presentar un resultado de una prueba PCR o de antígenos negativa con un máximo de 72 horas de antigüedad, redactado en inglés, francés o español (debe ser el original, ya que las traducciones no son aceptadas). Este documento también deberá incluir el nombre del pasajero, su fecha de nacimiento, la fecha de realización del test y el tipo de prueba. Si la documentación no incluye estos datos, o si no se presenta un resultado negativo, las autoridades británicas pueden imponer una multa de hasta 500£.
Una vez llegado a Reino Unido, el pasajero deberá guardar una cuarentena de 10 días completos, sin contar el día de llegada, en casa o en el lugar en el que se hospede. Además, deberá realizarse otro test COVID-19 en el segundo antes del segundo o después del octavo día de confinamiento. Este test deberá ser reservado por el viajero previamente a la llegada al país de destino, y será él/ella quien deba buscar la empresa o centro que realice la prueba. Los niños menores de 4 años están exentos de realizar esta segunda prueba.
Para poder entrar en Italia, todo pasajero mayor de 6 años debe presentar un certificado que acredite una vacunación completa (expedido con una antelación mínima de 14 días), una curación de COVID-19 (es decir, haber sido positivo anteriormente) o un resultado negativo de un test PCR o de antígenos (realizado 48 horas antes de la entrada en el país).
Los certificados pueden estar redactados en italiano, español, inglés o francés, y serán válidos tanto en papel como de forma digital. Además, desde el 1 de julio el Certificado COVID Digital de la UE está en vigor, lo que permite una mayor facilidad en las movilidades por la Unión Europea.
En adición, cada pasajero que entre al territorio italiano por vía aérea, marítima o terrestre, deberá que rellenar un formulario digital de localización del pasajero, disponible en la web app.euplf.eu/#/ . Una vez efectuado, el pasajero recibirá en su dirección de correo electrónico (facilitada en la web anterior) un código QR que podrá enseñar en el embarque desde su smartphone, o un documento pdf para imprimir y enseñar en su lugar.
España es considerada una "zona de riesgo básico" por el Gobierno de Alemania, por lo que para poder viajar al país, el pasajero deberá presentar una prueba de vacunación contra la COVID-19 (Pfizer, Janssen, Moderna o AstraZeneca) habiendo transcurrido dos semanas desde la segunda dosis (o la dosis única), una prueba de recuperación de COVID-19 que muestre un resultado positivo desde hace entre seis meses y veintiocho días, una prueba de PCR negativa tomada como máximo 72 horas antes de la llegada a Alemania, o un test de antígenos de como máximo 48 horas antes.
Esta prueba debe presentarse antes de la salida del país de origen en la aerolínea para viajes por vía aérea, y como máximo 48 horas después de la entrada si el viaje se realiza en barco o de forma terrestre. Si no se presenta una de estas acreditaciones, las autoridades alemanas obligan al viajero a permanecer en cuarentena durante 10 días.
Actualmente, y hasta el 11 de julio, Portugal se encuentra en "situación de calamidad", según la Resolución del Consejo de Ministros de Portugal del 24 de junio. Esto hace que no existan controles en la frontera terrestre colindante con España. En lo que se refiere a la vía aérea, todos los pasajeros mayores de 12 años deben presentar una prueba PCR negativa (realizada como máximo 72 horas antes del embarque) o un test de antígenos negativo (con un máximo de 48 horas de antigüedad), o bien el Certificado Digital COVID de la UE que acredite una vacunación completa o una recuperación con una antigüedad mínima de 14 días.
