El Juzgado de Instancia nº 18 de Valencia ha admitido a trámite una demanda contra Toyota España por el fallecimiento de un médico de Valencia al no haberse activado los airbags del vehÃculo que conducÃa tras sufrir un accidente de tráfico que acabó con su vida.
Los hechos ocurrieron el pasado 4 de abril de 2018, cuando la vÃctima se trasladaba a su trabajo en su vehÃculo Toyota cuando sufrió un accidente de tráfico, donde falleció. El escrito de demanda narra que después de que la Guardia Civil comprobase el escenario del fallecimiento, "llamó la atención a los agentes y a la familia que los airbags del vehÃculo no se habÃan activado", a pesar del fuerte impacto que causó numerosos daños en el turismo. En consecuencia, un gabinete pericial concluyó que "no se activaron los airbags frontales ni los laterales", asà como que "el desconectador del mismo se encontraba en la posición correcta".
Además, se indica que el impacto del vehÃculo fue "suficientemente importante como para haber hecho estallar los detonadores de los airbags", ya que el vehÃculo incluso "volcó de forma violenta impactando con el suelo y con el terraplén". Y consideran que "con casi toda probabilidad" de haber funcionado estos sistemas "la vÃctima podrÃa haber sobrevivido al impacto". Por otro lado, la Agencia de detectives Distrito 46 exploró el vehÃculo en el desguace y pudo confirmar "que los airbags no habÃan funcionado, pese a la violencia del impacto, tal y como se detalla en el informe".
La demanda también está respaldada por un informe médico que señala que "las lesiones más graves sufridas por el difunto se localizaron en el hemitorax derecho, siento éstas las que condujeron inmediatamente a la muerte" y que "de haber funcionado el airbag lateral, las lesiones se podrÃan haber mitigado, sin alcanzar la gravedad a la que llegaron".
El despacho de abogados Summons, quien ha interpuesto la demanda en nombre de la familia de la vÃctima, alega que no se trata de un "caso aislado", ya que diferentes medios de comunicación se habÃan hecho eco de "defectos y problemas similares en vehÃculos de Toyota", con "reclamaciones similares a la marca demandada". Además, indican que tras intentar llegar a un acuerdo amistoso con Toyota España, la marca se ha concentrado en solicitar una revisión del vehÃculo por su parte, algo imposible ya que el vehÃculo fue destruido tras declararse siniestro total.
Por otro lado, el despacho de abogados afirma que la Generalitat y la Mutua declararon que el fallecimiento de la vÃctima no se consideraba accidente laboral, a pesar de que se encontraba a 5 minutos del consultorio, por lo que también iniciaron una demanda contra la institución y el grupo de seguros.
Asà la cuantificación total presentada en la demanda contra Toyota España por daños y perjuicios asciende a 426.977 euros.