Un grupo de
investigadores de la Universidad Politécnica de València (UPV) trabaja en el
desarrollo de un nuevo producto fitosanitario de residuo cero –sin restos de
plaguicidas en los frutos- para el control de diversas especies de plagas de
pseudococcidos, comúnmente denominados 'cotonet', en los cultivos de cítricos y
caquis.
El nuevo producto
fitosanitario microencapsulado actuará sobre las poblaciones de hormigas, ya
que éstas actúan como protectoras del 'cotonet' frente a sus depredadores
naturales, según la UPV.
En el proyecto,
denominado NECOTDIM, participan investigadores del Centro Valenciano de
Estudios de Riego (CVER) y del Instituto Universitario de Conservación y Mejora
de la Agrodiversidad Valenciana (COMAV), está coordinado por Inesfly
Corporation y financiado por la Agencia Valenciana de la Innovación de la
Generalitat Valenciana, y en él trabajan también el IVIA, la cooperativa
Coarval y el grupo cooperativo Intercoop.
El 'cotonet' es una de
las plagas principales que afectan a los campos de cítricos y caqui de la
Comunidad Valenciana y genera unas pérdidas de unos 120 millones de euros, que
se estima puede suponer un 60 por ciento más en la próxima campaña, según
advierte la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja).
Además, los
pseudocóccidos pueden llegar a dañar el 80 % de la producción, lo que loS
convierteN en una de las grandes amenazas para la agricultura valenciana, que
solo en esta campaña ha generado perdidas de entre 70.000 y 80.000 toneladas de
caquis, añade AVA-Asaja.
"El control biológico
es bastante complejo y la reducción del uso de materias activas que pueden
utilizarse está generando problemas a los agricultores", señala el
investigador del Centro Valenciano de Estudios sobre el Riego de la UPV, Héctor
Moreno.
Bajo esta premisa nace
NECOTDIM, que plantea una solución a esta problemática basándose en el
desarrollo de un producto de residuo cero de acuerdo a las líneas de trabajo de
los ODS 2030 para el medio ambiente, explica Moreno.
El equipo de
investigadores de la UPV, a lo largo de los próximos dos años y medio,
trabajará en el desarrollo de este insecticida, su evaluación en condiciones
controladas de laboratorio, determinando la afección de este sobre suelos y
lixiviados; y finalmente, analizará el efecto del producto en condiciones
naturales de campo, determinando el comportamiento medioambiental y la eficacia
de su aplicación.
Este estudio se
enmarca en el cumplimiento del ODS 15: Vida de los ecosistemas terrestres, que
pretende procurar de aquí a 2030 un mundo con efecto neutro en la degradación
del suelo.
La UPV trabajará así
en la consecución de un producto contra el 'cotonet' de residuo cero en frutos,
suelos y aguas, "evitando así la contaminación de estos recursos en las
zonas de cultivo", destaca Moreno.