Detenidos en Torrent cuatro hombres por el hurto de dos grúas que posteriormente vendieron a una chatarrería

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Torrent a cuatro hombres de entre 21 y 54 años, de origen español, como presuntos autores de un delito de hurto, tras apoderarse de dos grúas y venderlas en una chatarrería. Al parecer los arrestados aprovecharon que las grúas se encontraban en un solar de Torrent donde las trocearon para llevarlas a la chatarrería. Necesitaron seis viajes para transportar en un camión las grúas seccionadas.

La investigación se inició cuando los agentes tuvieron conocimiento de que dos grúas pertenecientes a una empresa constructora habían sido sustraídas de un solar de Torrent. Las estructura de las grúas-torres eran el mástil, la pluma, la contrapluma, la corona y diverso cableado de cobre careciendo de los motores y los mandos, con un valor de unos 50.000 euros.

Los policías averiguaron que uno de los sospechosos había acudido a una chatarrería a ofrecer la venta de las grúas con el pretexto de que ya no las necesitaba, llegando a un acuerdo monetario con el dueño de la misma. Los sospechosos habían troceado las torres-grúas en el mismo solar donde las había localizado, para lo cual tuvieron que realizar seis viajes con un camión para trasladar los trozos hasta una chatarrería. Uno de los sospechosos actuó como propietario de las grúas y los otros tres como empleados.

Los policías detectaron que habían recibido seis abonos de la chatarrería por la venta de las piezas de las grúas, siendo la factura de mayor cantidad de 2.400 euros y la de menor de casi 600 euros.

Como consecuencia de las investigaciones, los policías averiguaron la identidad de los sospechosos y tras localizarlos, fueron detenidos por un presunto delito de hurto. Los policías localizaron las grúas seccionadas en la chatarrería por lo que quedaron intervenidas, perdiendo ya su utilidad puesto que ya no cumplen la normativa legal para su montaje.

De los detenidos, tres de ellos con antecedentes policiales, uno pasó a disposición judicial y el resto quedaron en libertad tras prestar declaración no sin antes ser advertidos de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial.